Al menos 21 personas murieron atrapadas en el interior de sus vehículos, en un gigantesco atasco causado por decenas de miles de visitantes que acudían a ver una inusual tormenta de nieve en una localidad montañosa del norte de Pakistán.

Según informó la agencia AFP, al menos seis personas murieron congeladas en el interior de sus vehículos, y se ignora, aún, si las demás víctimas perecieron asfixiadas tras inhalar gases.

En ese sentido, el ministro del Interior, Sheij Rashid, dijo que se movilizaron militares para despejar las carreteras y rescatar a los miles de automovilistas aún atrapados cerca de Murree, a unos 70 km al noreste de la capital, Islamabad.

Además, los videos compartidos en las redes sociales muestran a los automóviles atrapados en el atasco, con un metro de nieve acumulada en sus techos. "La gente se enfrenta a una terrible situación", aseguró Usman Abbasi, un turista bloqueado en esta localidad, donde la nieve sigue cayendo, según relató a la AFP por teléfono.


Durante días, las redes sociales de Pakistán estuvieron llenas de imágenes y videos de gente divirtiéndose con la nieve cerca de Murree, un pintoresco centro turístico construido por los británicos en el siglo XIX, y utilizado como sanatorio para sus tropas coloniales.

La oficina del jefe de la provincia de Punyab anunció que Murree fue declarado "zona de desastre" y urgió a la gente a no viajar a la localidad. Incluso, el primer ministro, Imran Khan, se declaró conmocionado por la tragedia.

"Nevadas sin precedentes y desplazamientos de personas sin constatar las previsiones meteorológicas deja a la administración poco preparada" para hacer frente a la situación, tuiteó el mandatario.

"He ordenado una investigación y adoptado en el lugar estrictas medidas para prevenir este tipo de tragedias", agregó.


Las autoridades advirtieron el pasado fin de semana que demasiados vehículos intentaban llegar a Murree, pero ello no desalentó a la multitud de conductores a viajar.

Más de 100.000 automóviles acudieron a la turística localidad en los últimos días para asistir a las grandes e inusuales nevadas, lo que causó enormes atascos en las vías de acceso y salida, según indicó un portavoz de la Policía.

Su proximidad de la capital hacen de Murree un frecuentado destino turístico para viajes de una jornada.

Asimismo, el ministro Sheij Rashid informó que residentes locales alojaron a la gente atrapada en la ciudad, y le proporcionaron comida y abrigo a los que se hallan en las afueras de la localidad.

También, las autoridades suministraron alojamiento en escuelas y edificios administrativos a quienes lograron salir de las congestionadas carreteras y llegar a la localidad.

El servicio de emergencia de Pakistán ya divulgó una lista con los nombres de las 21 personas cuya muerte fue confirmada.