Al menos cinco personas fueron detenidas ayer acusadas de haber alterado los documentos técnicos de fiscalización de seguridad de la represa de la minera Vale, cuya ruptura causó una tragedia en Brasil que ya suma 65 muertos y 279 desaparecidos, informaron fuentes oficiales.
Dos de ellos, detenidos en Sao Paulo, la mayor ciudad de Brasil, son ingenieros que no trabajaban directamente con la compañía minera Vale, sino que sus servicios habían sido contratados con otra empresa, de acuerdo a los agentes de la Fiscalía y de la Policía regional y nacional, a cargo del operativo.
Los otros tres eran empleados directos de Vale y fueron capturados en la ciudad de Belo Horizonte, capital del estado de Minas Gerais (sudeste).