Al menos dieciocho personas han muerto y una treintena permanece desaparecida a consecuencia del fuerte temporal que desde el pasado jueves ha azotado la isla mediterránea de Sicilia y, en particular, la provincia de Messina, informaron ayer fuentes de la Protección Civil de Italia.
Los heridos por el temporal, que se ha trasladado desde el este de España hacia el sur de Italia y que ha provocado importantes inundaciones, se cifran, por el momento, en varias decenas y 75 de ellos permanecen ingresados en hospitales de la zona a causa de una tragedia que ha dejado unas 400 personas sin hogar.
La catástrofe ha adquirido tal magnitud debido a que las inundaciones provocadas por el temporal han motivado un desprendimiento de tierra en la ciudad de Messina que, a su vez, ha ocasionado el derrumbamiento de varios edificios.
La mayoría de las víctimas quedaron atrapadas entre el barrizal, los escombros y las basuras arrastradas por la corriente del agua, entre las que un ingente operativo de servicios de emergencia trabaja por rescatar a personas atrapadas y encontrar a alguno de los desaparecidos.

