La presidenta brasileña Dilma Rousseff dijo que cuatro años de gobierno pueden ser insuficientes para alcanzar las metas establecidas en el combate contra la miseria, dejando por primera vez abierta una posibilidad de buscar un nuevo mandato al terminar el actual en 2014.

"Tenemos un gran compromiso que es acabar con la miseria de nuestro Brasil (pero) puedo no lograr acabar con ella en mis cuatro años", señaló la mandataria, consignó ayer el diario Estado de San Pablo y citó la agencia ANSA. El número de personas que viven en la miseria se redujo de 30 millones a 17 millones durante la gestión del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, según cifras oficiales. La Constitución brasileña autoriza una reelección presidencial.