Zulma Lobato abrió las puertas de su hogar para mostrar las condiciones en las que vive mientras enfrenta la posibilidad inminente de ser desalojada.
Zulma Lobato revela las difíciles condiciones de su hogar mientras enfrenta el riesgo de desalojo
“Estoy al borde del desalojo, no puedo estar tan bien”, confesó Zulma durante la entrevista con Nancy Duré. Explicó que lleva casi una década viviendo en su actual casa, pero las dificultades económicas la tienen al límite.
Con una jubilación de 270 mil pesos, se le hace imposible pagar los elevados alquileres que se encuentran en el mercado, que oscilan entre 150 y 200 mil pesos mensuales.
Así es la humilde casa de Zulma Lobato
La casa en la que Zulma vive es un modesto espacio de dos ambientes con una cocina integrada al living. Durante el recorrido que ofreció a la panelista, mostró con sinceridad el lugar que fue su hogar por años. “Esto sería un dos ambientes. Este es el living, acá tenés la cocina”, explicó mientras señalaba el área donde tiene un sencillo sillón y un amplio placard donde guarda sus pertenencias.
La vivienda, aunque pequeña y humilde, fue un refugio para Zulma durante los últimos años. Sin embargo, la amenaza de desalojo aumentó su preocupación por el futuro, llevándola a solicitar ayuda para encontrar una solución más permanente.
Ante la inminente pérdida de su hogar, Zulma hizo un llamado a la solidaridad. Expresó su deseo de poder adquirir un terreno donde construir una casa prefabricada que le brinde estabilidad.
“Si me puedo comprar un terreno y hacerme una prefabricada”, compartió con esperanza, mientras mencionaba que necesitaría alrededor de 10 millones de pesos para hacer realidad este sueño.
La salud de Zulma Lobato
Con respecto a su salud, en abril del año pasado la mujer comenzó a un fuerte dolor abdominal en una misa por lo cual fue internada unos días y tras salir no dio detalles acerca de lo sucedido, priorizando su salud.
Su amigo y manager, Lautaro Reyes, también explicó un poco acerca de los problemas económicos que padece, en donde indicó: “Ella es muy ahorrativa y gasta lo menos posible. Va a un comedor para no gastar plata, pero entre alquiler, impuestos, y su perrita, le queda lo mínimo para sobrevivir”.