En las salas de cine del país, incluyendo a las que están en San Juan, arriba la película de animación que recientemente ganó el Premio Oscar 2024, se trata del film ‘El Niño y la Garza’ (Kimitachi wa dô ikiru kaaka) del realizador notable de Japón y que hoy es considerado como un maestro en el arte de la animación que inspira a miles de creativos a lo largo del mundo, Hayao Myazaki. Producida por el mítico Studio Ghibli, con una extensa trayectoria fílmica con entregas como ‘Mi vecino Totoro’ (1988), El viaje de Chihiro (2003), entre otros hitos fundamentales de la historia del cine de animación, este largometraje plantea un drama en torno a un mundo cargado de fantasía, ambientada en los años 40 y que está inspirada en una novela de ficción de 1937 de Yoshino Genzaburo. Sin embargo, la trama de la película recorre otro camino que la aleja del libro original. Mahito, un joven de 12 años, lucha por asentarse en una nueva ciudad tras la muerte de su madre. Sin embargo, cuando una garza parlante informa a Mahito de que su madre sigue viva, entra en una torre abandonada en su busca, lo que le lleva a otro mundo. A partir de este momento, la trama toma un giro interesante.
El melodrama transita con una conexión a un contexto ineludible como es la Segunda Guerra Mundial que se extendía por el Pacífico haciendo de Japón un fuerte protagonista del conflicto. Mahito, se despierta en la noche, con sirenas en alerta sobre el inevitable bombardeo a la ciudad de Tokio. Con este panorama, el animador de 86 años de edad, retrata un universo que mixtura lo psicodélico, lo espiritual, lo natural y lo fantástico, con una gran fuerza simbólica en su mensaje que el espectador o espectadora deberá decodificar por sí mismo. Se dice, que tras esta producción, Miyazaki busca tomar un descanso y quizás sea su último trabajo profesional para la gran pantalla. Consultado por DIARIO DE CUYO, Nicolás Touris. Es dibujante, ilustrador e historietista sanjuanino -actualmente está desarrollando su libro Double Booking bajo el sello Papercutz- y se refirió sobre el film que precisamente vio hace unos días.
‘Tiene un nivel de producción muy alto, no sé si hay otro estudio que haya llevado el 2D a ese nivel de pulido. Las películas de él se caracterizan por el surrealismo y la simbología visual. Esta tiene tanta carga que merece ser visto varias veces. Tiene todos los clichés de Ghibli que amamos: las lágrimas gordas, monstruosidades que cambian de forma, viejitas, gente que rejuvenece o se hace anciana; y el dominio tanto de las escenas de acción en las cuales no escatiman ni un frame, como de las escenas de drama en las que se nota como han pasado horas estudiando una expresión facial. Es una belleza’, comentó el artista. Agregó: ‘En cuanto al ruido argumental, parece querer hablar sobre su legado, su maestro, su descendencia y como están destinados a ser destruidos por el mundo moderno. Este tema del mundo real siendo incompatible con el mundo de la imaginación es un tema sobre el que está obsesionado Miyazaki y siempre parece llegar a la misma conclusión: El mundo real gana, pero la vida sigue’.
Y concluyó Touris respecto a si con esta obra, el autor pone broche de oro a su carrera: ‘se supone, es la última peli de Miyazaki antes de retirarse. Antes de irse, logró que el rayo caiga por tercera vez en el mismo lugar, con un laburo que está a la altura de Chihiro o del Castillo Ambulante. Es un poco cruel la forma en la que habla de su hijo y de su legado durante la película, pero es entendible. No sé qué le depara el futuro a la industria, pero si este es realmente el ultimo film de este animalito, hay que atesorarlo’.
Por su parte, Antonio Acevedo, otro creativo local que trabaja para el estudio de animación ‘Blu’, en el desarrollo de escenarios y personajes para varias producciones, opinó que: ‘en cuanto a mensaje, la película cuenta en el fondo el legado que le deja al estudio Ghibli y a su hijo, que es también dibujante, como puede seguir sus pasos, pero su nieto no necesariamente tiene por qué seguirlo. En realidad, es una película para dejarse llevar, donde uno se hunde en la historia. En cuanto a animación, los primeros 15 minutos son tremendos, como las escenas del fuego, donde hay cosas a nivel técnico son inexplicables. Me llamó la atención de las historias de Miyazaki, son narrativas diferentes a nuestra mirada occidental y también, algo por resaltar es la personalidad de los personajes’, remarcó el ilustrador.
De acuerdo a estas apreciaciones expuestas por dos referentes conocedores de la obra del animador nipón, sin dudas, este largometraje será una opción interesante para tomar contacto con el mundo, las historias, los personajes que propone y apreciar el cine desde otra mirada.
DATO
El Niño y la Garza. La película puede verse en Cinemacenter todos los días a las 17 hs. hasta el 20 de marzo. También puede se puede acceder por streaming a la plataforma HBO Max.