Anoche, la Fiesta Nacional de la Vendimia 2012 celebró sus 75 años, junto a miles de almas en el Anfiteatro Frank Romero Day y los cerros aledaños. Alejandro Grigor, director general, armó una puesta prolija, muy colorida y con un libreto simple y narrativo, rescatando las raíces de la vitivinicultura. Más de 650 artistas recrearon la historia acompañados por un 50% de música en vivo interpretada por artistas locales y un 50% de música grabada, además de personajes de fábula. En el gran escenario hubo tres personajes principales, el hilo conductor: una "figura omnisciente" encarnada por un gran ojo, la "Madre Vendimia" y la bodega; enmarcados por excelsa tecnología, folclore clásico (cuecas, zambas y tonadas) y recursos lumínicos que volvieron a ser la principal atracción sobre los cerros. Fue una fiesta sencilla y tradicional, que apostó a los orígenes y símbolos de una celebración reconocida en el mundo entero.
Una Vendimia de colores

