La cultura es uno de los sectores seriamente afectados por la inactividad producto de la cuarentena. Los espacios culturales, como galerías, talleres o escuelas de danza que sobrevivieron a las primeras fases del aislamiento y a los tres meses de puertas cerradas, de a poco han comenzado a reactivarse. Al esfuerzo propio, se sumó la ayuda económica del Fondo Desarrollar que recibieron nueve emprendedores sanjuaninos independientes que resultaron incluidos dentro de los 341 proyectos culturales de todo el país que seleccionó el Ministerio de Cultura de la Nación, a través de la Secretaría de Desarrollo Cultural.

La Tetera, Amalgama Espacio Recreativo y Artístico, Patricias Espacio, Parral Galería, Salma-Espacio Integral de Arte, 

La Casa Roja Espacio, El Avispero Escénica, Allegra espacio de vuelos y Espacio en movimiento recibirán un subsidio de entre 75 mil y 99 mil pesos para hacer frente a deudas o gastos de funcionamiento o refacciones. 

Se trató de la primera convocatoria del programa, que incrementó en 9 millones su presupuesto inicial de 30 millones para así abarcar todos los proyectos seleccionados y por la enorme demanda analizan entregar una segunda tanda de subsidios (info en www.cultura.gob.ar).

Desde el organismo nacional explicaron que "participaron espacios que no habían sido beneficiados en convocatorias anteriores: centros culturales, peñas, milongas, clubes de música en vivo, espacios de arte, circo, danza y teatro; así como también espacios en los que se realizan actividades de carácter educativo o formativo relacionado con disciplinas artísticas como cursos, talleres, clases, seminarios; lugares en los que se realizan presentaciones de artes performáticas, exposiciones de artes visuales y audiovisuales, y actividades de carácter comunitario y solidario".

"El Fondo Desarrollar nos súper sirve para ponernos al día con los alquileres. En marzo fue la última entrada de plata, después yo subía los videos por Whatsapp a todos mis alumnos, me depositaban lo que podían en mi cuenta. Una vez que podamos rendir los montos del alquiler vamos a hacer mejoras, además de la inversión de material descartable y de higiene que debemos tener" contó Anita Sánchez, profesional de la danza y dueña hace 15 años de "Amalgama" donde también dictan tango, salsa, boxeo recreativo y artes marciales. "Desde el 11 de marzo que no nos juntábamos, ha sido muy duro, sobre todo para nosotros que somos totalmente independientes, yo no cobro carrera… no hay obligación de cursar" agregó Sánchez sobre el reencuentro con el equipo y los alumnos esta semana, luego de la reapertura de la actividad bajo protocolo especial y el sello de Establecimiento seguro que pudo obtener, destacó.

"Espero que el Espacio sea un lugar que brinde a los artistas posibilidad de trabajar y volver de a poco al ruedo". María Julia De Nardi.

En el mismo sentido, desde Parral Galería de Arte, Sebastián Recabarren contó que el dinero también será "destinado a cubrir parcialmente gastos de alquiler, servicios y honorarios". En el caso de Parral, definido también como un espacio de educación no formal destinado a las áreas de arte digital, ilustración y diseño y que funciona "como laboratorio de experiencias dónde mezclar diseño y nuevas tecnologías, tanto para experimentación, aprendizaje y un área comercial destinada a desarrollar experiencias lúdicas e interactivas para instituciones y empresas, desde el inicio de la cuarentena comenzamos a replantearnos formatos y modos de operar en una nueva normalidad", aseguró Recabarren. 

Ya sean lugares de producción de arte o de formación, la mayoría de los gestores culturales coincidieron en que tuvieron que reinventarse, dieron clases virtuales y ahora tiene al menos un alivio económico para seguir adelante. 

"Teníamos programado un 2020 con un cronograma súper cargado de creación y formación, y todo se vino abajo en marzo. Decidimos cerrar las puertas y hablar con la dueña del espacio para que nos espere y juntas ir viendo cómo seguir. A partir de la noticia de ser beneficiados, me puse en contacto con todos para poner en marcha un nuevo plan de inicio. Con el dinero podremos pagar las deudas generadas: alquiler, impuestos, honorarios, comunicación" relató María Julia De Nardi, responsable de Espacio en movimiento, donde dictan talleres de danza, canto entre otras actividades artísticas. De Nardi espera que su espacio sea "un lugar que brinde a los artistas posibilidad de trabajar y volver de a poco al ruedo". 

"Desde el inicio de la cuarentena comenzamos a replantearnos formatos y modos de operar en una nueva normalidad". Sebastián Recabarren.

Con el mismo entusiasmo, Agostina Guevara, directora de Salma Espacio Integral de Arte, donde dictan danzas árabes, folclore libanés, contemporáneo entre otros géneros, confió en que puedan retomar las clases con normalidad. Aunque recurrieron a las clases virtuales "en danza es difícil, sobretodo en niñas, que es necesario tener mayor contacto para corregir posturas"; aseguró que con la cuarentena se vieron muy perjudicados económicamente y estaban a punto de cerrar". 

En el caso de La Casa Roja, espacio de Coworking y espacio cultural, el dinero del fondo del ministerio de Cultura también ayudará a solventar gastos fijos. "Como equipo nosotros funcionamos parecido a una cooperativa. Entre todos hacemos un aporte mensual para cubrir los gastos de alquiler y mantenimiento del espacio, así también como las remodelaciones ya que es una casa antigua. El fondo ayudará a solventar algo de gastos fijos y con nuestro aporte se podrá sostener el espacio cultural en esta época en la que el ambiente artístico y cultural se ha visto afectado en actividades y trabajo" sostuvo Morena Soria, diseñadora industrial quien comparte sus proyectos con otros de diseño gráfico, arquitectura, producción musical y audiovisual que se gestan en La Casa Roja. 

Una bocanada de aire fresco para estos gestores culturales que retomarán su actividad con nuevos bríos y mejores ánimos, como si el año empezara otra vez.

 

CRÉDITO FOTO: Gentileza Leandro Minguez.