Sentados debajo de un gran roble, Ana le explicaba a su nieto Mariano cómo jugar con un trompo. "En mi casa eran todos varones y jugábamos con lo mismo" justificaba la abuela, mientras entre los dos intentaban hacer funcionar el "misterioso" juguete. Como Mariano, la mayoría de los niños que fueron ayer a la Casa Natal de Sarmiento lo hacían por primera vez y para sumarse a la propuesta del museo de celebrar el natalicio de Domingo F. Sarmiento -en el 208º aniversario- experimentando la infancia del prócer, jugando a lo mismo que él.
En uno de los patios de la casona, siguiendo las instrucciones de Melina, una de las guías del museo, hicieron sus propios barriletes, cantaron canciones infantiles, jugaron a la ronda y tuvieron un divertido recorrido por la casa del célebre sanjuanino al que se sumó Silvia Alaniz, la autora del libro Sarmiento también fue niño. La magíster y profesora les narró anécdotas en cada espacio de la casa, cantó junto a ellos y los ilustró en cómo era la vida del pequeño Domingo.
A medio día, en la puerta, junto a la estatua de Domingo Faustino, instalaron una mesa y una gran torta de merengue con las velitas armando el 208 aniversario. El grupo de mujeres, encabezado por la directora del museo María Rosa Plana, junto a las integrantes de la Asociación Amigos de la Casa Natal y del Ateneo Cultural, fieles custodios de la historia sarmientina, cantaron el feliz cumpleaños y la conmemoración se convirtió en fiesta.
Lo que sigue
Los festejos continuarán con actividades la semana próxima. El lunes 18 a las 10 tendrá lugar la conferencia Sarmiento y el norte argentino a cargo de Daniel Moyano; a las 19 será la Tertulia en lo de Paula, a cargo del taller literario Eutopía. El miércoles 20 será la Mateada tradicional organizada por el Ateneo Cultural Femenino Paula Albarracín de Sarmiento; el jueves 21 a las 10 invitan a la charla Sarmiento constructor de la Argentina Moderna a 150 años de su presidencia, dictada por Elena Maurín; y finalmente también ese día, a las 12, inaugurarán una nueva visita guiada, que excederá los límites de la casa para llevar a los visitantes a otros lugares de la ciudad importantes en la vida de Sarmiento.
Silvia Alaniz. Autora de Sarmiento también fue niño
"Era un hombre de carne y hueso"
-¿De qué manera se llega con la historia a los niños de hoy?
-Y… están disfrutando. Una mamá decía "mi hijo nunca vio un trompo"; también construyeron un volantín, armamos la muñeca de trapo con una servilleta y retazos del telar.
-¿Cómo surgió el libro sobre Sarmiento?
-Yo he tomado todos aquellos fragmentos que recuerda Sarmiento para construir a qué jugaban los niños. Al trabajar con cartas familiares me fui enterando de muchas cosas, me fui divirtiendo, descubriendo a un hombre de carne y hueso. La gente de mi época y otros, todavía creen que los próceres son de bronce y fueron serios siempre, y no es así. Además él era un hombre muy luchador, de carácter cuando tenía que serlo, pero muy amoroso con los dos hijos que tuvo.