Tiene 54 años, es mexicana y millonaria. Se trata de Salma Hayek quien, recientemente, salió de un complicado cuadro de coronavirus que la tuvo 7 semanas aislada y con oxígeno en su casa ya que "prefería morir en casa’, confesó acerca de su crítica experiencia en una entrevista a la revista Variety. En la actualidad, la bella latina vive en Londres, en una lujosa mansión junto a su hija Valentina, de 13 años, y su marido, el magnate de la moda François-Henri Pinault. Sin embargo, no siempre fue así. Tras dar a conocer que se contagió de covid-19, la también empresaria relató que sufrió discriminación en Hollywood por su procedencia y reveló que 2 directores le dijeron que no iba a conseguir un papel en sus películas, aunque más tarde ambos terminaron admitiendo que había sido la mejor en las audiciones.
Siempre joven y con un aspecto impecable gracias a una cuidadosa alimentación a base de jugos frutales, productos orgánicos, nueces y té verde, la morena rememoró que, si bien obtuvo su primer protagónico junto a Antonio Banderas en Desesperado, tuvo que hacer dos castings porque los productores querían a Cameron Díaz haciendo de mexicana. Además, relató que en otra oportunidad ni siquiera la aceptaron para hacer las pruebas para ser parte de La casa de los espíritus.
Pero, 30 años después, la artista que personificó a Frida Kahlo en 2002, es una de las intérpretes latinas más influyentes de Hollywood y la sexta mujer más rica del Reino Unido, de acuerdo a The Sunday Times. Es más, este año, está rodando House of Gucci, de Ridley Scott, mientras se prepara para el estreno de la secuela El otro guardaespaldas 2; y para su debut como una heroína del Universo Marvel, en Eternals, bajo la dirección de Chloé Zhao, que hizo historia por Nomadland en los Oscar. Una de las joyas del cine de habla hispana.
Looks
Diosa. Salma es de prestar mucha atención a sus peinados, si bien también se muestra al natural en las redes sociales. Jamás duerme con maquillaje, lo que elimina con aceite de coco o agua de rosas. Ella desmintió haber usado bótox asegurando que el ejercicio mantiene su piel y su cuerpo tonificados.
