Cuando aquella noche de agosto de 2009 bajó del Lincoln Presidencial blanco (cedido por la familia Adarvez Mancini) para ingresar -en medio de las luces de los reflectores- a la concurrida avant premiere en el Cine Teatro Municipal de la ciudad, todos se acercaban a saludarlo, con admiración y respeto. Visiblemente emocionado y feliz, el protagonista del film respondió con aplomada sonrisa y calidez a cada gesto, a cada abrazo y a cada felicitación. Y la escena se repitió al finalizar "Sarmiento: un acto inolvidable’, la última película de Pepe de la Colina que protagonizó y con la que trascendió fuera de la provincia, ya que se vio en otras pantallas, como la del famoso cine Gaumont, el Museo del Cine Pablo C. Ducrós Hicken y el Colegio Público de Abogados, todos en Buenos Aires; además de integrar el circuito comercial y transmitirse por canales de aire nacionales como Telefe. Fue sin dudas el rol del prócer -a quien él admiraba profundamente y en el que daba perfectamente con el "physique du rol’, tal como también señalaron medios nacionales- el papel más destacado en la carrera de Boy Segovia, entrañable actor de tablas y rodajes, además de activo personaje de la sociedad local, a quien San Juan despidió ayer, con profundo cariño y tristeza. Boy -que también rodó bajo las órdenes de De la Colina "Los huarpes y el conquistador’ y "Chiche’- falleció este 31 de diciembre por la tarde en la clínica Santa Clara. Tenía 87 años y las redes sociales se hicieron eco de su partida.
"Era un excelente dibujante y músico, cantor y guitarrero, compuso piezas folklóricas y también hizo teatro con Perla de Gatti y con Carmen Renard. Todo lo relacionado al arte le quedaba cómodo, siempre lo hizo, desde joven, como un hobby’, comentó a DIARIO DE CUYO el conocido cantante y veterinario Alejandro Segovia, uno de los seis hijos del exempleado bancario y apasionado rugbier, quien coincidió en que fue este último protagónico el más especial para él. "Estaba muy orgulloso. Era un admirador profundo de Sarmiento y le gustó mucho interpretarlo’, comentó sobre su padre, que integró la Peña La Tonada y fue socio del Club Social.
"Fue una construcción lenta: yo quería lograrla tal cual la hice. Me ofrecieron un DVD con la película de Enrique Muiño, a quien conocí de pequeño, y dije: "No, déjenme hacer mi Sarmiento, déjenme que lo imagine, que vaya creciendo dentro de mí"’, había contado Boy a Caminos Culturales, en una entrevista que se le hizo tras la proyección en el Gaumont, sin pensar quizás en aquel momento de composición la proyección que tendría esa interpretación.
Tres momentos de "Sarmiento…’, con Juan Ignacio Fernández, que fue el Sarmiento bebé de la película, en la avant premiere; en la grabación y en una escena.