El foyer se vestirá de fiesta esta noche, coincidiendo con el estreno de la primera de las tres funciones de la ópera La bohème -con entradas agotadas- que presenta el Teatro del Bicentenario. Será gracias a que también quedará inaugurada una exposición de vestuario del Teatro Colón que recibirá a los asistentes a la función de hoy y permanecerá en San Juan un par de meses. Son trajes, zapatos, pelucas, tocados usados en doce famosas óperas y en dos ballets presentados en las últimas décadas en el máximo coliseo argentino. En total son 29 trajes completos, majestuosos, confeccionados en los talleres del Cólon, algunos de los cuales fueron usados por grandes figuras de la lírica. Como un impecable traje negro confeccionado en 1931 que la soprano Regine Crespin usó para convertirse en Floria (Tosca) en 1962, o el que usó el barítono italiano Titta Ruffo, se enfundó en las ropas del Barón Sparpia en 1931.
También están el que usó Joan Sutherland 1969 para hacer de Violeta/Valerie de La traviata y el atuendo de Alfredo que se puso José Carreras en 1973, ambos diseñados por Eduardo Lerchundi.
Está el vestuario de La Cenerentola, la ópera de Rossini diseñado por Gino Bogani; trajes de Aida, de dos puestas distintas de Don Carlo (1978 y 2015), de Carmen, Tosca y La Favorita; también de los ballets El lago de los cisnes y La bella durmiente.
Para montar la muestra vinieron Pablo Franci y Eugenia Palafox ,que también trabajarán para las funciones de La bohème. Franci trabaja hace más de 30 años en el sector de Sastrería, a cargo de Carlos Pérez, y habla con pasión de los trajes que fueron creados en un taller con que hoy tiene 50 personas. Cuenta que "se guardan doblados porque es se deforman si están colgados"; que hay "pecheras de Don Carlos con impresionantes detalles" y pone énfasis en que cada traje tiene sus zapatos haciendo juego.
Eugenia Palafox es la jefa del sector de Peluquería y caracterización, que se encarga pelucas, postizos, tocados, joyería. "Las pelucas se realizan en tres materiales. Hay pelucas de pelo natural como las de Tosca, otras con pelo de yak, un búfalo del Tíbet se usan pelos del pecho y de la cola, que es blanco, como el usado en las pelucas de los reyes de La bella durmiente, por ejemplo y una en Aida que está hecha de una rafia que se usa para hacer sombreros", explicó.
Recorrera es muestra, sin dudas, permite tener cerca tesoros invaluables, que son celosamente custodiados y esta vez estará disponibles para todos, con entrada libre y gratuita.