Los amantes del montañismo (que no son pocos en San Juan) estarán de parabienes. Mañana, en estreno nacional, llega a la gran pantalla local Everest, una coproducción entre Gran Bretaña, Estados Unidos e Islandia, dirigida por Baltasar Kormáku y basada en la increíble historia real que rodea el intento de llegar a la cima de la montaña más alta del mundo. La película documenta el viaje inspirador de una expedición, desafiada mucho más allá de sus límites por una de las tormentas de nieve más feroces jamás encontradas por la humanidad. Los escaladores se enfrentarán a obstáculos casi imposibles de sortear, y la obsesión de toda una vida por tocar el cielo con las manos, se reducirá a una desesperada lucha por la supervivencia. Suspenso, drama y aventuras (además de litros de adrenalina) a 8.848 metros de altura, es lo que propone a lo largo de dos horas esta historia que podrá verse en 3D y 2D.

Escrita por Justin Isbell y William Nicholson, y protagonizada por Jake Gyllenhaal, Josh Brolin, Jason Clarke, John Hawkes y Sam Worthington, toma como eje la tragedia ocurrida en el monte Everest el 10 de mayo de 1996, en la que ocho alpinistas (uno de ellos Rob Hall, cuya viuda Jan, también alpinista y que estaba embarazada de Sarah al momento del desastre, fue clave en esta adaptación cinematográfica) fallecieron debido a una gran tormenta. Grabada en Nepal, en la misma base del Everest (que han ascendido 6.208 personas y donde han fallecido al menos 240 -a 800 metros de la cumbre, en la "zona de la muerte", yacen medio centenar de cuerpos de alpinistas que han muerto en el intento-), los Alpes italianos y en los Estudios Cinecittá en Roma. "Hubo mucho heroísmo en lo ocurrido", dijo Jan, quien agregó que "nos quedó claro a todos que iba a ser muy difícil contar todo en dos horas, pero esperamos que todos hayan quedado representados de forma correcta".