Camila Salazar tiene 23 pirulos. En la TV, fue la nena que formó parte del equipo de las Divinas junto a Brenda Asnicar en el programa Patito Feo, hace 5 años; pero el tiempo pasó y ahora es una mujer que se siente orgullosa de su "buen ir".

Y no le debe resultar muy fácil ser la "hermana de". "A ella no le importa lo que digan en Twitter; a mí sí me afecta", se confesó la muchacha. Ella recuerda que, en su tiempo de primaria, "le pedía llorando a mi mamá que Luli no me viniera a buscar más a mis clases de gimnasia porque eran tremendas las cosas que le decían los hombres por la calle".

Para Camila es la familia la que padece la exhibición de la explosiva conejita de Playboy. "Mis viejos sufrieron cuando Luciana salió en t… en MTV. Pero es el camino que ella eligió", reveló.

Y fue la propia Luli la que publicó una foto de las curvas sinuosas de su hermanita hot, en Twitter.

"La propuesta de sumarme a Combate 9 llegó después de la foto, que es un espanto porque no fue preparada. Luciana me tomó de sorpresa mientras yo le mandaba un mensaje de texto a mi exnovio, estaba con el pelo mojado…", contó a Personajes.TV, la joven de la que se dice que participaría en Bailando por un sueño 2015.

Sin embargo, aunque agradece a sus atributos físicos por tener trabajo en la tele, por otro lado dice que

prefiere jugar con su costado sensual, pero tener un límite, que no le interesa "ser una bomba sexy".

Lejos de la pantalla chica, sigue la carrera de Psicología, le quedan 4 exámenes finales y la tesis; y es por eso que asegura que nunca haría fotos subidas de tono. En fin, póngale un granito de fe y cuidado que si se descuida Luciana, le va a serruchar el piso.

"Me hago cargo de que conseguí trabajo gracias a mi cola", dijo la notera. O sea…