Ni extinguidos, ni congelados, ni desaparecidos ni ninguna otra teoría por el estilo. Están vivos, más que nunca, y vienen por todo… Al menos en la pantalla grande, donde a partir de hoy, los dinomaníacos podrán sumergirse en una nueva, escalofriante y recargada aventura plagada de especímenes de todos los tamaños y humores, varios debutantes en la saga que incluye hasta a algunos plumíferos. Sí, Jurassic World ha vuelto y no por nada tiene el título "Dominio". Dirigida para la Universal por el experimentado Colin Trevorrow (que ya anotó un taquillero éxito mundial en 2015) y con un enorme mimo para los nostálgicos -en este caso no solo por la temática, sino especialmente por el efectivo regreso, en los mismos roles, de las estrellas de la tirada original, Laura Dern, Jeff Goldblum y Sam Neill- el film es la secuela de El mundo caído y tiene lugar cuatro años después de que colapsara la Isla Nublar (localizada en Centroamérica), en medio de una convivencia ¿pacífica? entre los más grandes depredadores sobre la faz de la tierra: humanos y reptiles. Sin embargo algo alterará ese frágil equilibrio (de otro modo no habría una tercera parte) y la lucha entre ambas especies volverá a alcanzar escalas cinematográficas, para beneplácito de los fanáticos y de la industria, que tan bien la han pasado con películas de aventuras y ciencia ficción de grueso calibre como esta, fortalecida encima con los avances tecnológicos aplicados al séptimo arte, que tanto hacen lucir esos efectos especiales que adoran los amantes del género. 

En líneas generales, para poder parar esta catástrofe que se avecina -y que se anuncia como el final de la trilogía "World"-, Owen Grady (Chris Pratt) y Claire Dearing (Brice Dallas Howard) deberán recurrir a los mejores especialistas, algo así como los superhéroes del universo jurásico: el paleontólogo Alan Grant (Neil), la doctora Ellie Satler (Dern) y el Doctor Ian Malcolm (Goldblum), la entrañable vieja guardia. Y aunque de dinos este trío sabe y muchísimo, porque ya se las vio negras los años "90 con estos malgestados bichos, hay que decir que la nueva cruzada no será más sencilla, porque lejos de rendirse, las bestias regresan a recuperar su estrellato corregidas y aumentadas. 

Dicen los portales que ya tuvieron acceso a esta entrega, que además de los que ya se vieron y repiten, son siete las especies "debutantes" en este capítulo; y lo curioso es que no se trata de híbridos (como el Indominus Rex, el Indoraptor o el Scorpios Rex), sino de criaturas que efectivamente pisaron este suelo. Entre ellas están el Dreadnoughtus, una bestia de cuello larguísimo; el temible Quetzalcoatlus, un dino alado de la familia de los ya conocidos Pteranodones pero mucho más grande; una suerte de Velociraptor más chico, aunque extrañamente emplumado; y, al parecer, la estrella de los grandotes y de la cinta en sí: el Gigantosaurus, más grande aún que el Tyranosaurus Rex y que fue descubierto en el sur argentino.

En fin, la peli -cuyo costo rondó los 185 millones de dólares y que, pandemia mediante, se hizo esperar como tantas otras- promete no defraudar en ningún aspecto a los fanáticos de la franquicia, que así bajará la persiana a otra etapa… ¿Hasta que otro mosquito haga de las suyas?

Apostillas 

 

Dominio es la tercera entrega de la saga Jurassic World (Mundo Jurásico). El primer film homónimo, producido por Steven Spielberg y dirigido por Trevorrow, estrenó en 2015 y fue la 7ma. película más taquillera de la historia. En 2018 debutó la primera secuela, Jurassic World: El reino caído, dirigida por J. A. Bayona, con Trevorrow como guionista.

La saga "World" está ambientada más de dos décadas después de "Jurassic Park" (Parque Jurásico), primera parte de la franquicia. Y Dominio es la sexta película de la franquicia. 

La primera cinta de la franquicia, "Jurassic Park", fue dirigida por Steven Spielberg y estrenó en 1993. Allí debutaron Sam Neill, Laura Dern y Jeff Goldblum. Fue la película que más recaudó hasta que llegó Titanic (1997). Le siguieron Parque Jurásico II: El mundo perdido (1997) y Parque Jurásico III (2001).