¡¡10 años ya!! Es la expresión común cuando vuelve a la memoria el tiempo transcurrido desde el ACV que le costó la vida a Gustavo Cerati, quien había llegado a Venezuela con la gira Fuerza Natural, que había empezado aquel marzo en Perú. Ocurrió poco después del show en el campus de la Universidad Simón Bolívar, donde el ex Soda Stereo estuvo radiante. Y no es que la memoria se ponga sensible y generosa con la ausencia, que vaya si se nota, porque más allá del enorme legado, era ¡tan joven! Así lo contaron músicos que compartieron escenario con él y lo ratificaron cientos de fans que fueron testigos presenciales de una noche memorable, que Gustavo decidió cerrar una vez más con Lago en el cielo, de por sí un temazo, pero que varios percibieron con una energía distinta (ver El último show). 

Era el final de ese tramo, luego del cual volvían un tiempo a casa; pero nadie imaginaba que sería literalmente el final, el último show y para muchos, la última vez que verían con vida a Cerati. Después, con el tiempo, cuando se empieza a buscar explicaciones que no siempre hay y a "atar cabos", ese disco que dio nombre a la gira terminó con el rótulo de premonitorio y hasta se insinuó que en esa última estación se cumplía la profecía: "Si yo me retirara ahora, en este momento, que no creo que sea muy factible, pero supongamos que sí, me iría contento, por Fuerza Natural", había dicho informalmente, mientras grababan una promo. Su mamá, Lilian Clark también recordó en entrevista con Juan Morris para Rolling Stones que en Colombia él le dijo a una chica "Quizás sea mi última gira". Y en la misma nota, su música Anita Alvarez de Toledo aseguró: "el disco Fuerza Natural es un presagio". 

Cuando bajó del escenario, relatan las crónicas, Cerati fue "medio cansado" a su camarín y luego salió a sumarse a los músicos y técnicos para la foto de rigor. Pero ya estaba "raro". Cuando el sonidista Adrián Taverna lo vio pálido le preguntó si se sentía bien, pero no respondió. Volvió al camarín y allí lo encontraron minutos después, tendido sobre un sillón. Estaba como aturdido, lo socorrieron, ingresó a la clínica, lo sometieron a exámenes. Al parecer era una isquemia cerebral. Apenas trascendió la noticia, que se trató de mantener bajo siete llaves, se habló de un pico de presión, como bajándole el tono. También en el entorno creyeron que sería pasajero. No había perdido el conocimiento aún, de hecho ese sábado se mantuvo consciente y hasta se mostró con apetito, pero no podía hablar ni mover el lado derecho de su cuerpo. Pero el lunes siguiente sufrió un terrible dolor que le impedía quedarse quieto mientras le hacían una tomografía y centellograma. Ese lunes 17 de mayo entró en coma. Unas tres semanas después lograron traerlo a Argentina, donde el parte médico arrojó "Daño cerebral extenso con incidencia en el hemisferio izquierdo y tronco cerebral secundario, con hipertensión endocraneana". Nadie arriesgaba certezas sobre la probabilidad de sobrevida, pero la fe es lo último que se pierde. A ella se aferraron muchos, abanderados por la misma Lilian Clark, hasta que finalmente, el 4 de septiembre de 2014, el corazón de Gustavo dejó de luchar. (Fuentes: La Nación, Clarín, Rolling Stones, FlacoStereo, BBC)

 

  • El último show 

 

Fuerza Natural llegó a Venezuela para el último show del tramo. También sonaron otros hits y clásicos de Soda y cerró con Lago en el cielo. Gustavo usaba un traje blanco impoluto. "Un regalo, no mío, de la naturaleza o de lo que sea, para todos (…) Un lago en el cielo, que acá estamos bien alto", se despidió. El tema cerraba con un solo suyo que ya hacía delirar, pero… "No sé por qué estaba arengadísimo y el solo duró minutos y minutos. Fue impresionante, él estaba en llamas", describió Córdoba. En "Cerati: conversaciones íntimas’ (de Gustavo Bove), Coleman agregó: "El solo de viola que se mandó fue muchísimo más largo que de costumbre (…) Yo veía desde atrás cómo él estaba tocando prendido fuego". Esa imagen de Cerati quedó en la retina de una multitud que hoy sigue lamentando su temprana partida. 

 

  • En la ciudad de la furia, el favorito

Más de 9 mil lectores de DIARIO DE CUYO eligieron a través de un sondeo, y a su criterio, el mejor tema escrito por Gustavo Cerati de entre los más populares. A la cabeza de la lista quedó En la ciudad de la furia, que junto a Cuando pase el temblor en segundo lugar, y -bastante más atrás y pisándose talones- Corazón delator, Nada personal y Signos, conforman el Top Five local. En la ciudad de la furia integró originalmente el álbum Doble vida (1988); mientras que Cuando pase el temblor vio la luz en el álbum Nada personal (1985), con el que Soda Stereo comenzó a proyectarse a nivel continental. 

 

 

 

  • ¿Y vos qué pensás?

Protagonistas de la escena local compartieron sus opiniones sobre lo que Cerati fue para el rock, su legado y, de algún modo, lo que se llevó. "Era un radar de nuevas tendencias y un amplificador de sofisticación sonora", dijo Fabrico Montilla; mientras que para Gisella Ogás Puga fue "un adelantado y precursor en sonidos y en discursos que hoy son tendencia: Usa el amor como un puente, Mereces lo que sueñas". Por su parte, Iliana López Cardozo señaló: "Supongo que es una pregunta retórica, que me desafía a responder. Los grandes músicos no se llevan nada cuando se ausentan. Cerati dejó la magia que atrapa a tres generaciones, la excentricidad de la música ¡y el placer por una literatura lírica exquisita! ¡Generó nuevos gustos y tendencias musicales! ¡Su cara de ángel también sumó para conquistar a tantos fans!".