Al cierre de esta edición, el bajista, autor y cantante Horacio Eduardo Cantero, líder del grupo de rock Enanitos Verdes -uno de los emblemas del panorama musical de los ’80, surgido desde Mendoza- permanecía internado en el área de terapia intensiva de la mendocina Clínica de Cuyo, a causa de un cuadro de insuficiencia renal con la que ingresó el 29 de agosto. Según publicó ayer el sitio web de Diario Los Andes, el lunes pasado "fue sometido a una compleja intervención quirúrgica para extirparle un riñón y parte del bazo, confirmaron desde su entorno". Walter Gazzo, de Sitio Andino, agregó que el hijo de Cantero, Javier, indicó que "el estado de salud de su papá es crítico y que la evolución es muy lenta".

El músico nacido hace 62 años en la vecina provincia (adonde regresó a vivir en 2017, junto a su novia de la juventud que se convirtió en su esposa), sufrió el agravamiento de esta dolencia a la vuelta de una exitosa gira de la banda por distintas ciudades de Latinoamérica y de Estados Unidos, con la que celebran los 40 años del combo. Allegados al artista señalaron a Télam que Cantero arrastraba problemas renales desde hace tiempo y que incluso utilizaba bajos especiales de menor peso. 

Mientras tanto, Enanitos Verdes -que, en plena vigencia, sigue contando con la guitarra de Felipe Staiti y ahora tiene en la batería a Jota Morelli- mantiene en su página web una agenda de presentaciones que entre el 7 de octubre y el 3 de diciembre próximo contempla recitales en ciudades de Perú, México y Estados Unidos, segundo tramo del tour. 

El conjunto se formó en 1979 con Cantero, Staiti y el baterista Daniel Piccolo (que dejó el proyecto en 2009). Tres discos marcaron el despegue: En 1984, el primero, que sorprendió con Aún sigo cantando, Comiendo en el plato del perro y No se metan más, entre otras. Dos años después Andrés Calamaro produjo Contrarreloj, que abre con La muralla verde y suma Tus viejas cartas, Simulacro de tensión y Solo dame otra oportunidad. Y en 1987, Habitaciones extrañas (también producido por Calamaro) consolidó el rumbo al ritmo de El extraño del pelo largo, Por el resto, Pasos, Sumar tiempo no es sumar amor, Te vi en un tren, y otros que también trascendieron las fronteras del país.