Reconocida, respetada, famosa… y plena. Así recibió Maribel Verdú su medio siglo de vida, un intenso viaje que atravesó tormentas y praderas, y en el que ha confesado haberse aferrado a una brújula para guiarse y que aún usa: "Carpe Diem", expresión que significa "aprovecha el día", de la que ha hecho su "frase de cabecera". Y tanto que se define como una "disfrutona", sin hacerse mala sangre por lo que pasó o lo que vendrá. La Medalla de Oro de la Academia Española, protagonistas de películas como Y tu mamá también, La buena estrella, Siete mesas de billar francés (entre otras) asegura que eso ha ido en beneficio sobre todo de su "buena salud mental", que reconoce como su mayor riqueza, más allá de todos los premios y aplausos cosechados con toda justicia.

"Es la única que al final te hace sobrevivir o vivir más acorde con tu manera de entender el mundo, tu sentido del humor, y tus prioridades, pues creo que estoy mejor que nunca, francamente", dijo a EFE la intérprete, que si bien celebró los 50 pirulines por lo que significa una cifra "tan redonda", en verdad no está tan pendiente de las fechas ni de los números. Su vida, claramente, pasa por otro lado y sabe explicarlo.

"Tengo una gran ambición, pero solo para encontrar cada día mi espacio de serenidad y encontrarme", ha dicho Verdú, quien confesó incluso no temerle la muerte… sólo a la suya.

 

  • Looks.

Plena y vital, la consagrada actriz española se mantiene enérgica y optimista con el paso de los años; y lo refleja.