Claudia Pirán hizo pie en Ideas del Sur y se armó la polémica. La cantante sanjuanina compitió en Soñando por Cantar el miércoles -en la edición de Tigre-, fue ovacionada y pasó a la final, pero duramente cuestionada por algunos medios nacionales (ver aparte) y en San Juan cosechó elogios y críticas. Las opiniones de la gente se multiplicaron en Twitter, Facebook y en los medios (como DIARIO DE CUYO online y Radio Colón) considerando en su mayoría que Pirán no debía estar en un concurso amateur porque ya es una artista consagrada. Como si eso fuera poco, la presentación del conductor, Mariano Iúdica, generó dudas en algunos comprovincianos cuando aseguró que era una "sanjuanina que vive en Tigre’.
La intérprete, que fue invitada a sumarse a la gala en forma directa -lo que también sembró dudas sobre el proceso de selección de los participantes- explicó a DIARIO DE CUYO por qué aceptó participar y destacó que el reglamento del concurso permite la participación de cantantes profesionales.
"Cuando me llamaron ni había noticias del casting San Juan, fue hace un mes y medio. Y por cuestiones de producción no se puede cambiar la sede. No quita que yo esté apoyando a San Juan en sus galas. Además me parecía que cantar en San Juan era quitarle un espacio a un compañero, pero la mayor razón fue la convocatoria que me hicieron no teníamos noticias que el Soñando venía’, se explayó, la cantante que ayer estuvo como invitada, junto a otros finalistas en Este es el show,que conducen Denise Dumas y José María Listorti.
– La principal crítica fue que sos una artista consagrada compitiendo con principiantes.
– El reglamento permite artistas profesionales. Yo mandé todo mi curriculum, todos sabían. Igual quise estar como una más, por respeto al resto de participantes, pero la producción sabía de mi carrera y el jurado lo manifestó, me conocían.
-¿Cómo evaluás el rédito que te deja tu participación en el show?
– No tengo apoyo de nadie. No tengo una producción detrás, los que me cuidan son amigos, pero que tienen ciertos límites de económicos, contactos. Esta fue una oportunidad muy digna, yo no fui a hacer otra cosa; fui a hacer lo que sé hacer que es cantar; no fui a bailar o a pintarme la cara de verde. Era una oportunidad y las oportunidades se aprovechan.
Con esto se puede acceder a un prensa que no podría tener de otra forma, y quieras o no estas cosas terminan definiendo quién va o no a un festival. Para artistas como yo es difícil mantener una continuidad. Yo estoy consagrada pero no tengo la posibilidad de trabajar fluidamente. No todo lo que brilla es oro. Aquí fui sola, sin cuña, sólo cantando.
– ¿Cómo te sentiste después de cantar?
– Iúdica lloraba, yo lloraba, lloraba de verdad. Fue impresionante. Todos me trataron perfectamente.
– No hubo devolución del jurado.
– Bueno sí, hablaron, Lerner me dijo que el corazón de mi remera me quedaba chico pero sí de lo técnico no dijeron nada.
– No hablaste de tu enfermedad al final.
– Y no hubo pie. Pero creo que al final no hizo falta explicar nada, porque terminé haciendo lo que sé hacer, cantar. Este programa es de la gente y nosotros nos debemos a ellos. Va a llegar un día que por no tener apoyo voy a tener que dedicarme a otra cosa. No quiero hacerlo, no me voy rendir.
– ¿A qué escenarios te catapulta esta aparición en El Trece?
– Me abre el país. No me cabe duda que ahora voy para tener más trabajo. Quienes arman los festivales te consideran por la popularidad.

