En el marco del 25to. aniversario del fallecimiento de Astor Piazzolla, el bandoneonista y compositor cuya obra revolucionó el tango a nivel mundial y falleció el 4 de julio de 1992 a los 71 años en Buenos Aires; el Quintento Escolaso ofrecerá su tributo, hoy a las 21 en la Sala Auditorium del Teatro del Bicentenario. Para la viola Rayna Diankova y el violoncellista VeselinYanakiev de Bulgaria, y el violinista tunecino Nidhal Jebali; el trío de extranjeros que completan el grupo junto a los argentinos Vanina Danna (violín) y Esteban Calderón (bandoneón): "Decir Piazzolla, es decir Argentina’.
Los músicos consultados por DIARIO DE CUYO, pertenecen también a la Sinfónica de la UNSJ, y cada uno relató su experiencia con ese compositor nacido en Mar del Plata, que pasó su infancia en Nueva York, hizo de canillita en el film El día que me quieras, durante 2 años fue parte de la orquesta de Carlos Gardel y pasó por la formación de Aníbal Troilo, hasta convertirse en el genio que le dio al 2×4 un estilo vanguardista.
Ellos no mamaron la cultura del tango piazzollano, algunos ni lo conocían. Sin embargo, al llegar a la Argentina y radicarse en San Juan, se toparon con su universo y quedaron "maravillados’, al leer sus partituras y más aún al ejecutarlas.
Instalado hace 2 años en la provincia, Nidhal Jebali es el único del conjunto que lo interpretó antes de su arribo al país. "Es un compositor conocido en todos lados, yo toqué algo de él en Estados Unidos, antes de llegar aquí. Dejó un repertorio importante no sólo para Argentina sino para el mundo, fue su embajador’
Vesselin y Rayna se establecieron en San Juan hace 25 años, como marido y mujer. Ambos coincidieron en el valor inconmensurable del legado del gran Astor, aquel que recordaba que en su casa paterna de Estados Unidos conoció al pianista Bela Wilda, a quien a cambio de las clases, su madre le hacía la manicura y dos veces por semana una fuente de pastas; y que un amigo argentino que también vivía allá, Andrés D’Aquila, le abrió los ojos al mundo del bandoneón, instrumento que su padre le compró y con el que luego se perfeccionó ya de regreso a Mar del Plata, con Líbero Pauloni.
"Aquí empecé a tocarlo apenas llegué. El tangazo fue la primera obra que hice con orquesta. Mi acercamiento fue de a poquito. Él pertenece a la humanidad. Hay muy buenos compositores en todos los países pero expresan, en especial, el folclore y la cultura de su país; en cambio, Piazzolla se puede interpretar por argentinos o no argentinos. El violinista Gidon Kremer lo popularizó y hasta lo combinó con Bach y Shostakóvich, logrando una interesante fusión’, expresó el violoncello del conjunto.
"Llegamos casi juntos al país, Vesselin fue el primero. Yo lo había escuchado nombrar pero acá fue donde profundicé en su trabajo’, dijo Rayna.
Y respecto a lo que provoca su música y cómo debe abordarse al inolvidable autor de Libertango y Adiós Nonino, entre otras; para Rayna es una acción que requiere energía y que "a uno lo exprime. Si te desconcentrás un poquito, te perdés inmediatamente’, explicó.
En tanto Vesselin, rescató su "vitalidad’ y, sobre todo, "la combinación entre su mundo y la técnica de composición europea, lo que lo hizo tan cosmopolita y entendible para el extranjero’.
"Su idioma es muy clásico. No es sólo tocar la nota y listo. Uno tiene que dar mucho de uno, no es sólo tocar la nota sino entrar en su mundo para que todo tenga sentido. No es lo mismo que una obra clásica, hay más de imaginación e intuición’, señaló Nidhal.
"Uno de sus atributos es que su repertorio se puede combinar con el de compositores clásicos porque utilizó la técnica de composición clásica, la polifonía; por eso, tanto se acerca y puede convivir con Bach por ejemplo’, agregó el búlgaro, quien subrayó que: "En Europa está muy de moda’, incluso su hermano, Droujeliub, director de una camerata suiza integrada por algunos argentinos radicados allá, interpretan su obra. En definitiva, para el trío: "Piazzolla es Argentina, como lo es Messi para los futboleros’.
Cómo será el recital
Nacido en 2014, con la novedosa formación de cuarteto de cuerdas y bandoneón, el Quinteto Escolaso subirá a escena hoy a las 21 en la Sala Auditorium del Teatro del Bicentenario con un repertorio íntegramente piazzollano. Se interpretará: Suite Troileana (Bandoneón, Zita, Whisky y Escolaso) y la Suite Lumiere (Soledad, Muerte, El amor y La evasión). La entrada es de $150 y se puede adquirir en boletería del complejo, de 10 a 20.
Fotos gentileza