Buenos Aires, 15 de Julio.- Diego Maradona le festejó el cumpleaños 23 a su novia, Rocío Oliva, en la base militar de Campo de Mayo, y, si bien hubo un fuerte operativo de seguridad, el Diez volvió a discutir con los fotógrafos.
Según diario Muy, Maradona aterrizó el viernes por la noche en Ezeiza y, esta vez, pasó inadvertido al usar una salida lateral de la pista principal del Aeropuerto. Desde allí, el ex DT de la Selección se dirigió directo a Bella Vista, donde vive la familia de Oliva.
El sábado por la mañana, Diego dio el ok para que comenzaran con los preparativos para la noche. Un rato después llegaron a la casa estilistas y peluqueros para embellecer a toda la familia.
Recién a las 10 de la noche Maradona y su novia salieron de la casa, él con un traje gris y ella con un conjunto de raso negro. Veloces, se subieron al BMW del Diez y se dirigieron al predio militar de Campo de Mayo, gestionado por el padrastro de Oliva, miembro de la fuerza.
En el camino al festejo, Maradona se bajó del auto, molesto con un fotógrafo que, según la opinión de Diego, le había "pegado demasiado el auto". La situación no opacó el festejo que terminó a las 7 de la mañana.
En tanto, el martes Diego se presentará en Tribunales para ratificar la denuncia penal contra su ex, Verónica Ojeda, por la exposición del hijo de ambos Diego Fernando.