"Llamame más temprano bebé…’, "Voy a salir, porque la noche no es para dormir…’ dicen dos de los pegadizos temas que prendieron como pólvora entre los seguidores de la cumbia pop. Hits que como otros del grupo los jóvenes sanjuaninos volverán a bailar y corear el sábado 21, cuando la banda uruguaya Mano Arriba llegue al complejo Costanera, en Chimbas, donde tendrá lugar -organizado por el gobierno provincial- el mayor festejo del Día de la Juventud y la Primavera.
"El público siempre nos ha recibido muy bien así que tenemos muchas ganas de ir, sobre todo para una fecha como esta, que va a haber muy buena onda", adelantó la cantante del combo, Natalia Ferrero, quien dialogó con DIARIO DE CUYO sobre el perfil de la banda y sus horizontes.
– Están desde 2014, pero hace relativamente poco sacaron su primer disco…
– Sí, no habíamos hecho disco porque como que ya no se usa… sacamos temas, que también sirve para ver cómo funcionan con el público. Y bueno, ahora sí sacamos el disco, que tiene todos los temas que hacemos; y le agregamos cuatro más que son acústicos, como para mostrar otra parte de la banda. Mano arriba se caracteriza por ser música de fiesta, pero como tenemos también influencias de otros géneros y nos gusta hacer otras cosas, dijimos "bueno, pongamos otra cosa distinta en el disco".
– No significa que la banda vaya a mutar de género… ¿o sí?
– En realidad podría llegar a ser, no nos queremos casar con algo, pero es verdad que hasta ahora nos han conocido por esto. El último tema del disco es reggaetón, por ejemplo… Digamos que es pop, que justamente se caracteriza porque podés mezclar.
– ¿La idea es ir aggiornándose?
– Exactamente, creo que no le podés dar la espalda a lo que está sonando…
– Ni renegar de lo que los hizo conocidos…
– Claro, siempre manteniendo la identidad, que creo que la identidad de la banda es música de fiesta, alegre, buena onda; pero que cuenta una historia y siempre con una chica cantando, o sea, desde la perspectiva de una mujer, que siento que es lo que le gustó de la banda a la gente.
– ¿Ese fue un sello que buscaron o se dio?
– Sabíamos que queríamos hacer música de fiesta, eso fue lo primero que pensamos cuando empezamos el proyecto, esa es la esencia; pero siempre teníamos charlas pensando que había poco punto de vista de la mujer. Bueno, el que escribe las canciones de Mano arriba es un chico, pero medio que las charlas se daban en torno a esto: ¿qué personaje querés representar? Y yo no quería un personaje de víctima, la que dice "me hiciste esto y me lastimaste", entonces medio como que fue tomando ese color…
– ¿Ustedes proponen y el público toma o no; o el gusto del público es el que marca el camino?
– Supongo que es un poco de cada cosa, sí creo que hay que escuchar al público, lo que está sonando en el boliche y lo que a la gente le gusta bailar, eso en el momento de componer se tiene en cuenta; pero parte de ser artista es proponer algo nuevo, mover algo en el público, llamar su atención, ya sea con una frase o porque se identifican con una situación. En el último tema fue, por ejemplo, el histeriqueo de los hombres, que siempre se dicen que las mujeres son histéricas, y este es como "mirá que los hombres también son bien histéricos".
– ¿Creés que esa perspectiva ha permitido más identificación con el público femenino?
– Claro, pero igual hay buena onda con los hombres, eso es lo bueno, como que se divierten, porque está hecho en un tono como irónico, divertido, no se ofenden, sino que también lo bailan…
– ¿Qué otras cosas sentís que distinguen a Mano Arriba en la cumbia pop?
– Bueno, nosotros somos más grandes, tenemos 30 o más; eso lo hace un poquito diferente; y que también le damos mucha importancia a que la banda en vivo suene bien. Quizás, al principio había una cosa un poco inocente de una banda de amigos que se juntaban a hacer música y divertirse, ese es el imaginario que tiene la gente en la cabeza; y después de cinco años, capaz que aprendimos muchas más cosas y vemos el mercado de la música de otra manera. Esto se convirtió en nuestro trabajo, antes era un hobby
– ¿Cuándo fue ese quiebre?
– Cuando vinimos a Argentina. Nuestra música ya estaba sonando, pero cuando firmamos con una agencia que nos mueve, yo por ejemplo tuve que dejar mi trabajo porque fue tal el volumen de esto, que no podía.
– ¿En qué trabajabas?
– Tenía una tienda de ropa online con mi hermano. Preferí cerrar porque era inviable hacer las dos cosas…
– ¿Y alguna vez pensaste que iba a pasar esto?
– Si me decís hace seis años, ni me lo hubiera imaginado, no se me hubiera pasado por la mente. Cuando vimos que los temas estaban sonando, que la gente se los había aprendido, ahí empezamos a soñar y a pensar hasta dónde lo podíamos llevar.
– ¿Y cuál es la proyección del grupo hoy?
– Ir a otros mercados y seguir sacando más temas, e intentar seguir con la identidad y proponer cosas nuevas…
– Tras la explosión de la cumbia pop, algunas bandas quedaron en el camino…
– Sí, como todo lo que es una moda… Cuando algo funciona todos quieren hacer lo mismo, pero…
– Las modas tienen principio y fin… ¿La cumbia pop llegó para quedarse?
– Creo que sí, pero hay que ver grupo por grupo, porque es difícil mantener la identidad, eso es trabajo en el tiempo, seguir tocando y haciendo cosas. Yo creo que hay que seguir adelante…
– ¿Te ves en 10 años con la banda?
– Bueno, mi idea es a fin de año sacar temas sola, como una búsqueda mía. Mano arriba es un producto que es lo que es y está buenísimo porque a la gente le gusta mucho; pero yo también quiero hacer otras cosas. También será bailable, pero no de repente cumbia, va a ser pop con reggaetón, también puede llegar a tener trap…
– ¿Pensás seguir ambos caminos o elegirás uno?
– Y, por ahora será en paralelo, porque empezar una carrera solista no es una papita. El resto de mis compañeros también tiene sus cosas, está entendido que cada uno puede hacer algo personal. Hay cosas que no se le pueden pedir a Mano arriba y todos tenemos otros géneros que nos gustan y no tenemos por qué limitarnos a una sola cosa.
– En definitiva, no hay que tener miedo a los cambios…
– Todos los cambios dan un poco de miedo, pero artísticamente es necesario, que pasen cosas nuevas es un desafío para uno; si no te quedás estancado en un lugar y no está bueno.
DATO
- MANO ARRIBA. 21 de septiembre, complejo ferial Costanera (también estarán Ráfaga y Bersuit). Desde las 13 hs, entrada libre.