Después de conocerse los problemas financieros que tiene el Cirque du Soleil, donde medios españoles anunciaron deudas acumuladas por 900 millones de dólares y que, se afirmó, que el 95% de su plantel artístico está despedido -debido a la cancelación de 44 espectáculos por la pandemia- DIARIO DE CUYO consultó a Nicolás Busso, quien junto a su esposa Florencia Aracama, son los únicos artistas argentinos dentro de la compañía y señaló que la mayoría no fue despedida -incluyéndose- sino que se trata de suspensiones temporales y que para la segunda mitad del año volverán a trabajar. Ellos se establecieron en México, desde septiembre de 2018, actúan en la obra llamada "Joya", en la Riviera Maya. Es una puesta especial con un ambiente natural selvático como parte del espectáculo y que tiene una modalidad denominada Dinner Show, similar a lo que se realiza en Las Vegas. La dupla ejecuta en el mismo su número Aerial Rings Duo o Dúo Aéreo de Anillas.
Desde la localidad mexicana, el acróbata oriundo de Lomas de Zamora explicó la situación particular que están viviendo en plena cuarentena: "Hace dos meses estamos suspendidos de manera temporal. Como los contratos son anuales, son permanentes, pero en este lapso de tiempo y no hemos sido despedidos. Todos, dependiendo de cada show, tenemos un sueldo mínimo. Hay algunos que, por ejemplo, entran en el servicio de desempleo del gobierno de Estados Unidos o el de Canadá y les paga el sueldo el Estado. Por ahora, estamos entrenando y hacemos emisiones por Instagram para mantenernos motivados y con buen estado, esperando con ansiedad volver a actuar. Calculamos que a mediados de julio estaremos activos de nuevo", contó Busso.
Respecto a la interna de la compañía, el gimnasta remarcó que no conoce en profundidad qué decisiones y debates hay entre los productores, pero está firmemente convencido que no quedarán afuera: "La compañía conserva y cuida mucho a sus artistas. Imáginate, de solo pensar en contratar a nuevos elencos, les llevaría más de medio año construir un espectáculo nuevo. Por eso, volveremos todos a trabajar y de nuestra parte, queremos volver al escenario lo más pronto posible. Entre los chicos del elenco nos mantenemos contactados con videollamadas, hacemos juegos por Skype y Zoom en los ratos libres, está bueno también despejarse ya que pasamos todo el día encerrados".
Flor tiene 27 y Nicolás 30, ambos vienen de entrenar desde muy chicos se iniciaron en la gimnasia artística y la gimnasia rítmica. Desde el Cenard, fueron miembros de las selecciones nacionales de ambas disciplinas. Sin embargo, el deseo por volcarse al espectáculo escénico fue de manera paulatina. Hasta que lograron ser contratados por el circo y en 2016 debutaron en "Séptimo Día, No descansaré" el homenaje a Soda Stereo. "Fue una experiencia fantástica. Entrenamos muy duro para poder llegar y tener un lugar aquí, estar en el circo, es como jugar en primera", dijo Nicolás. Si bien el clima en el elenco está sereno y pese a la suspensión de espectáculos, Flor y Nico, como al igual que sus compañeros de escenario, no dejan de ejercitarse: "Nunca nos deprimimos, sabemos que será una crisis que será superada. Todo el mundo está parado, mucha gente en el mundo ha perdido su trabajo. Por eso, tratamos de motivarnos entrenando", expresó.