En charla con Intrusos, Charlotte Caniggia se refirió al viejo episodio de la gallina que tenían en su casa, y que -decían- era porque su madre hacía brujerías. "La compramos porque estábamos aburridos (…) la corríamos, la corrían los perros. Nos ayudaba a matar el tiempo. El aburrimiento te mata mal’, explicó.
