Para chicos. Eugenia Di Paola y Fabricio Montilla le ponen el cuerpo, la voz y las ideas a un proyecto para niños.
(Foto: Marcos Urisa)

 

Ambos son músicos. Tienen sus carreras como solistas pero de tanto en tanto, se juntan para dar vida a un colorido proyecto musical. Eugenia Di Paola y Fabricio Montilla son Tutty Frutty, el único conjunto local que hace música dedicada a los niños más pequeños. Se trata de un espectáculo integral, con canciones infantiles del repertorio universal cantadas en vivo, con juegos y coreografías que ofrecen principalmente a escuelas y jardines de infantes, aunque también transitan otros escenarios.

Comenzaron a rodar con el dúo en 2016, después de un festival que se realizó en el Centro Cultural Conte Grand. "Yo venía ya trabajando con talleres para chicos y pensé que en los talleres venían 10 niños y eran los únicos que yo veía por año. Y pensé cómo se podía hacer algo más abarcador, compartir con más chicos y dije ‘hagamos un espectáculo’. Convoqué a Eugenia, que desde el 2011 hemos estado compartiendo música en distintos proyectos. Arrancamos tocando para 200 pibes en una carpa, en ese festival. Yo vengo del teatro, a Euge le gusta jugar, así que rápidamente conectamos nosotros y con los chicos. Llevamos muchos años en la docencia con chicos y nos gusta. Convertir eso en un espectáculo no nos resultó muy difícil", contó Fabricio sobre el origen de la propuesta que desde entonces han presentado esporádicamente debido a sus otros compromisos musicales.

"En San Juan no hay música para chicos. En mi experiencia como productor de espectáculos también, es que los niños no son llevados por los adultos ni al teatro ni a música para chicos. Los artistas no producimos para chicos y los padres tampoco consumen eso", analizó el artista.

Montilla, que acaba de sacar un disco (En la niebla) y de retomar con su original Delivery de canciones, se explaya sobre el concepto base que comparte con Eugenia. "Nosotros pensamos la música para chicos como música, no como música para chicos. Hay una especie de cliché o standard de que la música para niños tiene que ser con soniditos agudos y una vocecita finita. Hoy los pibes escuchan la música que escuchamos todos, cumbia, reggaetón, rock", dice, mientras su compañera apunta: "Hay una subestimación de la música y del niño que es notoria. El chico, cuando uno lo subestima, se da cuenta y da vuelta la cabeza. Te aman o te odian", consideró Eugenia; "son muy honestos, son más exigentes que el público adulto pero a la vez te devuelven más", agregó Fabricio.

Durante la primera parte del año, el dúo estuvo trabajando en la música de una obra infantil de Mendoza, así que retomó sus presentaciones recién a fines de mayo en una escuela de Caucete. Es justamente el ámbito escolar a lo que apuntan. "Las maestras te lo agradecen mucho porque es la posibilidad de ofrecerle a los chicos algo que está pensando para ellos y que interactúa con los contenidos que se dan en preescolar, porque es 3 a 8, pero fundamentalmente está pensado para los niños del preescolar; además que se produzca en San Juan, es económico porque no es que cobramos mucho y además nos movemos con todo con el sonido, con los instrumentos", expresó Fabricio sobre su actuaciones, que gestionan personalmente.

 

"Hay una especie de cliché o standard de que la música para niños tiene que ser con soniditos agudos y una vocecita finita".
Fabricio Montilla

 

"El show de Tutty Frutty maneja ciertos parámetros, tenemos canciones que son clásicos y otras más nuevas. Con los clásicos tenemos enganchados un poco al papá y a la mamá, como la Cucaracha, Samba le le, que están en el imaginario popular, hay juegos y los chicos pueden bailar. También trabajamos algunas cuestiones educativas, las vocales por ejemplo, vamos introduciendo al chico en ese mundo del conocimiento a través de la música, el juego y el canto", explicó Eugenia, quien tiene una carrera como solista bajo el nombre de Eugenia Renata, está trabajando en un EP, pero asegura que ambos proyectos la cautivan por igual. "Estoy tratando de darle impulso a esa carrera, pero la música para chicos me lleva a un lugar tan lúdico, hermoso y libre, que me llena de otra manera", dice la cantante, que también trabaja en jardín maternal y es maestra de música en el Colegio Santa Rosa.

Mientras siguen recorriendo escuelas, Tutty Frutty proyecta hacer un disco y así poder llegar a más chicos.