En el marco del 1er Festival Internacional de Música de Cámara, que desde el 7 de septiembre hasta el 25 de octubre se realiza en el Auditorio Juan Victoria, hoy tendrá lugar la noche de los saxofones. El "Cuarteto de Saxos de la UNSJ", integrado por tres docentes y una alumna avanzada de la cátedra, hará un recorrido por un repertorio amplio que incluye música académica y también arreglos de música popular, en especial tango y folclore.
"Es un repertorio variado para que se puedan apreciar las posibilidades que tiene el instrumento. En general se relaciona mucho al saxofón con la música de jazz, con el rock & roll y en realidad fue creado pensando en la música académica; lo que pasa es que se popularizó en ese ambiente y quedó como encasillado en esos géneros", comentó a DIARIO DE CUYO Lucas Lillo, profesor asociado, a cargo del saxofón barítono. La formación se completa con Mariana Cuadra, titular de la cátedra, en saxo soprano; Matías Araya, profesor de trabajos prácticos, en saxo alto; y Marina Pastén, alumna avanzada, en saxo tenor, una formación típica de cuarteto de saxofones.
"Hay mucha obra para este instrumento. Sucede que se creó recién a inicios de 1840 (por Adolph Sax), entonces no existía en todo el período que comprende el barroco, el clásico y hasta el inicio del romanticismo. Compositores como Mozart, por ejemplo, no llegaron a conocerlo. A partir de 1850 empieza a haber participación del saxofón en la música académica; Debussy, Ravel, Gershwin son algunos de los que lo incluyeron. Y hoy por hoy, muchos compositores contemporáneos escriben para saxofón", agregó Lillo, quien precisó que el grupo hará obras originales para saxo y también adaptaciones para cuarteto de saxofones, como Contrabajeando, de Piazzolla.
Instrumento que continúa evolucionando, Lillo comentó que entre las características particulares de este instrumento está su registro. "En nuestra formación por ejemplo hay saxofón soprano, alto, tenor y barítono, se ve una analogía con las voces humanas, desde las más agudas o estridentes a las más graves", explicó el músico y docente. "Otra particularidad, y por lo que fue creado, es que tiene la facilidad de poder sonar muy fuerte como el trombón o la trompeta, y a la vez puede tocar cosas muy dulces como un violoncello. Es un instrumento potente pero a la vez dulce, que se puede tocar muy rápido o muy lento, es muy versátil", añadió Lillo, quien apuntó que la cátedra tiene muchos alumnos y aspirantes, aunque poco cupo porque son clases prácticamente individuales.
Cuarteto de saxos de la UNSJ. Hoy a las 21 hs, en el Auditorio Juan Victoria. Entrada libre y gratuita.