Desde el año pasado Rebel Wilson es noticia por el gran cambio de hábitos que encaró y que se vio reflejado en su físico. La protagonista de Pitch Perfect y Bridesmaids, entre otras, bajó más de 30 kilos y se convirtió en una "persona diferente". Ella misma reconoció que despojarse de ese exceso de peso le cambió la vida, pero también dejó bien claro -ante el ataque de haters y metiches- que para nada está obsesionada con su nueva figura y que tampoco está fanatizada con el descenso de kilos. De cara a su próximo film, K-Pop: Lost in America, Rebel asegura que no se priva de algunos gustitos, sobre todo cuando está de vacaciones, como sucedió en su paso por Turquía, donde probó varias de las especialidades de esa región, especialmente de Capadocia. El punto es que la rubia optó por un estilo de vida saludable cuyos beneficios la hacen sentir "muy cómoda", por eso no deja de lado su alimentación equilibrada ni el ejercicio regular, que -además- le permiten darse esos gustitos sin perjudicar su salud. Según publicó US Magazine, el objetivo de Rebel no es el descenso de peso en sí mismo, sino verse y sentirse como quiere, zona que parece haber encontrado al igual que -señaló- su amor propio y el orgullo de saber que tiene las riendas de su vida. De hecho, hace un tiempo, la australiana explicó en una entrevista que "mi objetivo nunca fue ser delgada. Sigo siendo yo. Me encanta tener curvas y sigo siendo curvilínea, pero en una versión más saludable. Ese era mi objetivo".
LOOKS
Rebel ha sostenido su estilo a lo largo de los años, aunque con su logro se animó a mostrarse más y a experimentar algunos cambios de look, de cabeza a pies.