Don Carlo es la grand ópera compuesta por Giuseppe Verdi que subirá a escena para inaugurar la temporada operística del Teatro del Bicentenario mañana, a las 21; y alcanzar un rol solista en este megaespectáculo representa “tocar el cielo con las manos” para cualquier lírico del mundo. Esto es en pocas palabras lo que significa ser parte de su elenco para los seis cantantes que se desempeñan en San Juan que tendrán un lugar privilegiado en esta puesta: Jorge Romero, Octavio Sosa, Agustín Hidalgo, Paula Marco, Mónica Skowron y, en especial, Romina Pedrozo, quien interpretará un papel protagónico como la Princesa de Éboli, la dama de compañía de la reina Isabel de Valois.
“Esta es una ópera de llegada, a la que una mezzo llega luego de mucha trayectoria y es un compromiso cantarla siendo joven; se requiere de una gran madurez muscular y vocal, por eso me preparé de manera extra en Buenos Aires, dejando de lado otros compromisos laborales”, expresó la mezzosoprano Romina Pedrozo que caracterizará a una noble de gran influencia en la corte de Felipe II.
“Don Carlo es un lujo, lo máximo a lo que se aspira. Además es un placer trabajar bajo la supervisión de Eugenio Zanetti, es un sueño hecho realidad”. Romina Pedrozo, mezzosoprano.
Por la importancia de su rol, la mezzosoprano vive con los nervios previos al debut pero con una satisfacción que no cabe en la opulencia de su traje. No es para menos: Don Carlo fue la primera incursión en la lírica para Zanetti; el director de cine, teatro, arte y pintor, ganador de un premio Oscar a Mejor diseño de producción/dirección de arte en 1995 por la película Restauración, que por este trabajo obtuvo el premio de la Asociación de Cronistas del Espectáculo (ACE) en 2016.
Bajo la mirada del prestigioso Zanetti y la dirección de la Sinfónica de la Universidad Nacional de San Juan bajo el maestro Emmanuel Siffert, estos artistas compartirán escena con grandes figuras foráneas como el tenor Gustavo López Manzitti como Don Carlos, el Infante; los bajos Lucas Debevecmayer como el rey de España y Cristian Di Marco, el Inquisidor; y la soprano Mónica Ferracani, Isabel, la princesa de Francia.
Desde febrero es que ensayan con prisa y sin pausa, “felices” por la posibilidad de tener actuaciones individuales en esta producción del Teatro Colón.
Para Paula Marco, que tendrá un rol masculino al interpretar al adolescente Teobaldo, paje de Isabel, no deja de ser un “orgullo” que “de tantos roles que tiene Don Carlo, hayan tantos lugares destacados ocupados por gente de San Juan”, opinó la soprano haciendo hincapié en la complejidad de “una de las óperas más complejas del universo musical que compuso Verdi en el apogeo de su carrera basado en la historia de Schiller”.
De todos los que se verán en escena, Jorge Romero, director del Coro Universitario de la UNSJ, se pondrá en el hábito de “El monje”. “Soy la consciencia de Don Carlo”, como se describe, dentro del drama que ese personaje vive con su padre, el Rey Felipe, quien decide tomar por esposa a Isabel, que era su prometida. “Abro la obra, hablando sobre la tumba de Carlos V, hago una especie de crónica de lo que fue, de su carácter y de esa ilusión que tenía de parecerse a Dios”, subrayó quien en esta oportunidad hace el “solo” sin dejar de lado la dirección de los coreutas. “Coordino a las 60 voces de la agrupación más los 30 que tuvimos que sumar, la mayoría de la Escuela de Música, porque es un título que necesita un coro multitudinario. Y, por otra parte, trabajamos los reemplazos de los titulares, como se hace en las óperas del mundo”, apuntó Romero sobre esta versión recortada que se desarrollará en cuatro actos, no en cinco como la original que se estrenó en 1867, con música de Verdi y libreto en francés de Francois Joseph Méry y Camille du Locle.
“Es ‘la’ ópera. Es musicalmente bellísima, nadie se va a aburrir, desde la primera hasta la última nota es muy agradable al oído”, manifestó Octavio Sosa, el tenor que hace su aparición como el heraldo real que anuncia la coronación del rey y es parte del coro; él ya tuvo una participación en La Traviata como el jardinero de Violetta pero haber llegado hasta acá es “lo más grosso” en la materia.
En tanto que Mónica Skowron hará la voz del cielo, Agustín Hidalgo recreará al Conde de Lerna, “podría decirse que es un secuaz de Filippo, que avisa de la llegada del Gran Inquisidor”, destacó el tenor que hace su debut. “Mi primera vez y ¡nada menos que con esta tremenda obra de Verdi!”, exclamó quien fue con todas sus expectativas a la audición y, seguro de sí mismo, consiguió lo que quería. Claro que es “todo un desafío”, tanto en lo vocal como en lo escénico: “Tengo que ponerme a la altura de los grandes, es difícil, pero va todo bien”, reflexionó en voz alta.
“Nosotros nos entrenamos con un trabajo muscular de resistencia para cantar sin amplificación y proyectarnos para pasar la orquesta; manteniendo la voz colocada luego de entrar en calentamiento”, señaló Pedrozo.
“¡Estamos tan emocionados! Es una gratificación impresionante ser solistas en Don Carlo y ser de San Juan, es la gran oportunidad que tenemos los cantantes de lucirnos”, afirmaron a dúo en referencia a la grand ópera, un subgénero de ópera francesa caracterizado por la complejidad temática, la inclusión de ballet, la abundancia de personajes, la fastuosidad de la escenografía, vestuarios suntuosos y efectos escénicos.
DATO
- Esta superproducción subirá al Teatro del Bicentenario mañana, el viernes y sábado, a las 21.
- El precio de las entradas es de $150, $450, $600 y $750.
- La venta es en boletería de la sala, de 10 a 20; y los días de función desde las 17. Vía online pueden adquirirse a través de tuentrada.com.
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Publicado por Diario de Cuyo en martes, 10 de abril de 2018