El primero luego de la salida y posterior muerte del ex vocalista Alejandro Sokol, Las Pelotas editó su nuevo disco, Despierta, que conserva una perceptible aura meláncolica, pero también exhibe la unidad del grupo en la pared de guitarras construida por Germán Daffunchio y Tomás Sussmann.
"Se nos presentó una necesidad de renacer, de re-inventarnos. Con todo lo que había pasado creo que había una necesidad nuestra de que haya más música", dijo Daffunchio, quien el próximo 21 de septiembre -tras cuatro años de ausencia en estas tierras- mostrará su nuevo trabajo en San Juan, en la Fiesta de la Juventud, gratuita, organizada por el gobierno provincial en las inmediaciones del Parque de Mayo.
La placa está atravesada por la ausencia de Sokol que dejó Las Pelotas en 2008 y que falleció de un infarto en enero de 2009, en Río Cuarto (Córdoba), adonde había ido a visitar a su hija y a un amigo.
El Cd, que tiene una dedicatoria a Sokol, contó con la participación de Fernando Ruiz Díaz de Catupecu Machu en "Si quisiste ver". Además viene acompañado por un interesante Dvd filamdo por Ricardo Pacha Pacciaroni, un amigo de la banda, que muestra todo el proceso de grabación del disco y le permitira a los fans el acceso a la intimidad del grupo.
– ¿Qué querían contar en este disco?
– Daffunchio: Hay una cosa que está buenísima, que es que las letras no necesariamente hablan de uno, o sea, si bien están hablando de uno, igualmente hablan de algo que le pasa a todo el mundo.
– ¿Cómo logran esa comunión con la gente a partir de canciones melancólicas?
– Daffunchio: La gente que nos sigue es gente que vive como nosotros. No hacemos música pensando en la popular, en un coro para la cancha, jamás apuntamos a eso.
– Gabriela Martínez: Lo que sucede en los shows tiene que ver con la conexión que se logra; estamos vibrando nosotros y esta vibrando el público porque estamos en esa misma sintonía. Es gente que piensa como nosotros, que siente como nosotros.
– Con la irrupción de internet, ¿hay cada vez más trabajo para los músicos y menos para la industria o menos para los dos?
– Tomás Sussman: De seguir así ya grabar un disco va a ser para promocionar una banda y que salga de gira a tocar en vivo, porque lo que es la venta del disco es insignificante. Hasta te llegas a plantear para qué tanto laburo y tanta inversión. Laburás para que todo suene bárbaro y después lo escuchan en MP3, que tiene una calidad de sonido pésima, es de apenas el 10% de la que tiene el cd. Por ejemplo la música acústica pierde toda la belleza al sonar en MP3.
– Pero hay músicos a favor de que la gente baje música por internet.
– Sussmann: Una cosa es la piratería del pibe que se lo baja y se lo copia de un amigo porque no tiene plata y otro es el que tiene la fábrica de copiado y se llena de guita. Yo cuando veo a alguien comprando un cd trucho en la calle le digo que se lo copie de un amigo. Para qué le va a pagar a un tipo por una fotocopia y un cd.
– ¿Y qué alternativas ven para solucionar la crisis del disco?
– Sussmann: Los discos que son de artistas nacionales, no importa el género, no deberían tener los impuestos que tienen y en vez de salir 35 pesos, deberían salir 15.
– Ustedes fueron siempre una bandera de la independencia con su sello Silly, ¿qué le recomiendan a una banda que empieza y que quiere editar un disco?
– Daffunchio: Una constante de las bandas que empiezan es que hacen un primer disco y creen que con eso ya esta. Y no, eso es el principio; al disco tenés que venderlo, salir a tocarlo, promocionarlo, hacer otro y otro. Hay una fantasía con eso de hacer del disco. Porque uno piensa la independencia como una herramienta para estar en contra del sistema, pero en realidad vos también estás vendiendo y estás enfrentando tu pequeña empresa a monstruos que tienen cadenas de distribución, cadenas en las radios. Si no se logra un contacto para poder mandar la música, no hay difusión y eso es algo que nos ha pasado a nosotros con montones de discos y así es difícil competir. Pero nuestra carrera, con 20 años rompiéndonos el lomo, ratifica que esto no es sólo hacer un disco, sino ser consecuente a través de toda una vida y algún día llegarás. (Télam).

