Una experiencia musical diferente. Eso propone Julieta Buschiazzo, una sanjuanina radicada en Córdoba, que encontró en el Kundalini yoga su forma de vida. Hija del guitarrista Omar Atreo, Julieta (foto) logró unir su formación musical con una práctica milenaria como es la meditación. Así surgieron los conciertos y el disco de "canciones mántricas" como esta singular artista llama a su música, que traerá por primera vez a San Juan el 26 de octubre en el Auditorio del Museo Franklin Rawson ($45 anticip. en Tagore, Libertador 1556). Los mantras, son "sílabas, palabra o frase que tiene un significado y que ha sido bajado en un estado de conciencia elevada por una persona, un iluminado, que está en una alta frecuencia y puede decodificar el mensaje" explicó Buschiazzo, aclarando que ella "no es una iluminada aún", por lo que los mantras elegidos para sus canciones son algunos de los contenidos en la práctica de Kundalini yoga, pero con un formato breve. "Es una forma de hacer más atractiva una práctica que es milenaria", comentó la artista quien adelanta que en sus conciertos se produce "una energía particular" y que de forma espontánea "la gente queda con una sonrisa". Por eso cada una de sus presentaciones es vivida de una manera especial, como "una bendición o un regalo". En San Juan tendrá un condimento extra, cantar ante la familia. "Sé que será diferente en lo personal, es mas fuerte con mi familia presente. Ellos son de otro palo en lo musical, espero que puedan disfrutarlo", dijo a DIARIO DE CUYO Julieta o Pavan Kaur, tal es su nombre espiritual y artístico, que significa la princesa que porta el prana, la energía vital, que ahora esparcirá en estas tierras.