Ayer trascendió que un juez autorizó el trasplante de Sandro a pesar de la oposición de un médico y un fiscal. Los órganos que recibió el Gitano son de un chico de 22 años que se suicidó. La oposición se debió a que la ley de donación prohíbe que sean pacientes psiquiátricos y el joven recibía tratamiento por esquizofrenia. Pero ante la decisión del los padres de donar, el juez -que destacó que "la ley tiende a la conservación de la vida" y que marca eso "para evitar el tráfico de órganos y desalentar irregularidades"- lo autorizó.
Según el último parte, Sandro seguía estable, aunque por cansancio muscular continúa entubado para ayudarlo a respirar. "Su situación es estable, si bien hemos tenido que entubarlo debido a una debilidad muscular, porque se agotaba al respirar", explicó el cardiocirujano Claudio Burgos.