El cantante y compositor Iván Noble comenzó a conducir los domingos a las 22 el ciclo radial "Fulanos de nadie", que emite AM del Plata, y manifestó la alegría que significa tener este espacio que desea se convierta en "una cuevita donde antes de arrancar el lunes la gente pueda ir a abrigarse un rato".
En medio de un presente áspero e incierto, el reconocido y popular músico, quien estuvo al frente de Los Caballeros de la Quema en los 90 y luego inició un camino como solista que transita desde hace más de dos décadas, propone desde la radio un espacio para compartir con los oyentes sus curiosidades y las cosas que más disfruta.
"Yo uso el programa de radio para combinar las cosas que disfruto, los libros, las canciones, ese es el combustible del que está hecho el programa", contó en charla con Télam Iván Noble, quien además se encuentra terminando su nuevo disco, creado y atravesado íntegramente por el humor desatado por la situación planteada por la pandemia.
Si bien ya se había desempeñado en el medio en otras oportunidades, "Fulanos de nadie", marca su debut en AM. "Tengo alguna experiencia en radio, he hecho radio varias veces pero siempre en FM –expresó-. Esta es mi primera a vez en AM y eso para mí es un placer, porque soy escucha de AM, tiene otros tiempos, otro paisaje, otro clima, que es exactamente el que a mí me gusta escuchar, y ojalá pueda crear ese espacio para la gente que anda dando vueltas un domingo a la noche por la radio".
Íntimo y cercano se lo escuchó al cantautor en los dos primeros programas de este ciclo que conduce en las trasnoches de domingos, de 22 a 00, y que de algún modo representa un sueño cumplido en su vida, ya que lo encuentra trabajando en el medio que más lo apasiona.
Dueño de una voz personal y un estilo propio, en el último tiempo Noble fue volcando sus inquietudes en las redes (se convirtió en ocurrente tuitero) , despuntó el vicio en el formato podcast ("Cuánto cuesta este capricho", Nacional Rock) y fue columnista en más de un programa de radio.
"Aunque sea una frase súper dicha, la radio de verdad que es compañía, mucho más que cualquier otro medio de comunicación, y sospecho que en momentos de tanta angustia e incertidumbre eso ocurre más que nunca, ojalá que hacer este programa sea un pequeño remanso dominguero", dijo el músico nacido en la localidad bonaerense de Morón.
En entrevista con Télam, Iván Noble habló, entre otras cuestiones, acerca de los puntos en común que encuentra entre la radio y la música, y de próximo disco, al que definió como íntimo y melancólico.
Télam: En el ciclo acompañás al oyente como lo hacés desde siempre con tus canciones. ¿Es posible plantear un paralelo entre hacer radio y hacer música?
Iván Noble: No sé si se puede hacer un paralelo estricto entre hacer música y hacer radio, pero son dos formas de acompañar, en ese sentido me parece que la música siempre es un refugio, siempre es una curita en el alma, cada uno de nosotros tiene una banda de sonido de su vida, y tal vez un programa de radio sea un pariente cercano de eso.
T: El domingo a la noche es un horario perfecto para la reflexión y la distensión. Se te escucha muy cómodo en esta franja.
IN: Si, a mí los domingos a la noche me gustan mucho, a pesar de que está la tristeza atávica esa que creo que traemos de la época del colegio. Sin embargo a mí me gustan mucho, sobre todo porque para los músicos los lunes son nuestros domingos, entonces los domingos a la noche son nuestros sábados. Me gustó mucho que el programa se haga un domingo, me parece que le da cierto espíritu.
T: En relación a tu faceta musical, venís preparando un disco. Ya lanzaste dos canciones, "Adonde sea que estés viajando" y "¿Quién no es una bomba de tiempo?"; ¿Cuándo saldrá a la luz ? ¿Cómo influyó la situación de pandemia a la hora de componer las canciones?
IN: El disco lo estoy terminando de grabar, salieron esos dos cortes el año pasado, está por salir el nuevo single, y después ya va a ser un disco entero. Incluirá 11 canciones y está
absolutamente cruzado por el estado de ánimo y por clima pandémico, porque lo escribí enteramente durante el año pasado, así que la situación pandémica atraviesa el humor del disco seguro. Es un disco íntimo, pequeño, puertas adentro, melancólico, supongo que se va a parecer bastante a lo que es mi cabeza y mi corazón en estos momentos. Ojalá que cuando dentro de un tiempo todo esto sea un pésimo recuerdo, este disco sea un testimonio de estas épocas bravías.