Muy codiciado -y seguido milimétricamente por ojitos con abundante rimmel- fue el paso del príncipe qatarí Nasser Al Attiyah por Argentina, donde ganó el Dakar en categoría autos. País generoso si los hay, no hubo escasez de señoritas bien gauchitas dispuestas a hacerle conocer las bondades de esta tierra. Sin embargo el morocho multimillonario de 40 pirulos puso sus oscuros ojos en una muchacha de 22 añitos: Camila Velazco, la hija de María Zorzenón y Segio Velazco Ferrero.

Modelo y actriz, fresca y bonita, los presentaron en una fiesta de una conocida bebida. Al igual que el logo del energizante que lo sponsorea, Al Attiyah se puso como un toro rojo cuando divisó a la niña que en 2008 fue tapa de Playboy y a quien pronto se verá en la peli Sudor frío. Y le tiró los galgos. ¿Adivine cuál fue la respuesta?.

Joven, fachero, exótico y con billetera, no hubo demasiado que pensar. Mucho menos cuando -como ella misma reconoció en AM- había ido "de pesca".

"Al principio, me empezó a mirar, bailamos y ahí lo fui conociendo un poco más. Hablábamos un poco en inglés y otro poco en castellano, pero nos logramos entender. Es re seductor’, contó a TN. Bastante menos formal fue el diálogo con AM, donde dejó claro que en realidad no hubo tanto preámbulo: él la tomó de la mano, se besaron… "un beso llevó a otro y enganchamos…Yo la pasé mejor que con nadie", subrayó por si a alguien le quedaba alguna duda.

Después del fugaz (duró apenas un par de días) y ardiente encuentro, la parejita pactó volver a verse en abril, cuando su alteza llegue para correr el Rally. Cuentan que el príncipe ya compró un complejo en Carlos Paz -su lugar en el mundo, habría dicho-, adonde atenderá a su novia argentina. Es que parece que la muchacha -por ahora- no está muy dispuesta a seguirlo a lejanas tierras. En cuarto año de Ingeniería Industrial (no es sólo una cara bonita) explica que "Esto que estoy viviendo es una aventura y no puedo dejar de lado mi vida".

Pero bueno, por lo pronto Cami le pegó fuerte al qatarí (las otras deben estar arrancándose las extensiones), que no para de mandarle mensajitos. "Me mandó uno donde me puso habibi, que significa mi amor", se ufanó en exitoina.com.

Flechazo real, no faltan los que ya fantasean con una Máxima versión morena. Salvando las distancias… ¿Qué dice usted?