Hace tiempo y desde que Gustavo Santaolalla irrumpió con Bajofondo sabemos que el bandoneón se lleva muy bien con la música electrónica y anoche en Renatto Martín Ferres lo dejó bien claro. El músico sanjuanino se presentó como solista por primera vez en San Juan, trayendo su espectáculo de formato DJ Set, donde intercaló pistas y sampler con la ejecución en vivo de bandoneón con segmentos de la música de Bajofondo y composiciones propias.

En su paso por su tierra natal, Ferres eligió compañía sanjuanina sobre el escenario. Lo acompañaron Albano Manganelli -en la batería para Fandango- y Cande Buasso, convocada para cantar Baldosas mojadas, tema de Bajofondo que tiene varias versiones, una de ellas interpretada por Nelly Furtado, y Tuve sol.

Ferres abrió con Monserrat, en una versión intervenida con sus propias notas, una dentro de otra, ‘efecto mamushka’ dice el músico, después le siguieron algunos de las obras propias que incluyó en el espectáculo tanguero de la bailarina Mora Godoy, impresionantes solos de bandoneón, y varias canciones de la banda, con nuevos arreglos.

El comienzo de la noche fue vibrante, bien arriba. Un público heterogéneo acompañó la potente propuesta, que en perfecta sincronización, fusionó trip hop, drum’n bass y tango; y desde una mesa, la familia local del músico seguían con fascinación cada acorde, y Ferres saludó a su padre por su cumpleaños.

Mientras que al cierre de esta edición, aún faltaba gran parte del show, que incluiría grandes hits como el Mareo, Pa’Bailar, Perfume y Gran Guignol, ya se notaba que aunque Ferres junto a sus compañeros bajofonderos ha recorrido los más diversos escenarios del mundo, estar aquí es distinto. ‘Sí, es especial estar acá’, confesó a este diario el bandoneonista antes de subir al escenario. No quiere que se le note, pero los aplausos sanjuaninos son casi un mimo para el alma.