La primera velada jachallera -el viernes pasado- volvió a reverenciar las cosas del pasado y de la tradición, con más de cinco mil almas en ese templo sagrado de los jachalleros, que es el Anfiteatro natural Buenaventura Luna. Y el tiempo acompañó después de jornadas frescas y de las dudas de la realización.

A las 22 en punto la verba ampulosa de Mario Echegaray dio rienda suelta a este recortado festejo tradicionalista jachallero -que por el fuerte temporal que azotó, debió reducirse sólo a este fin de semana- que comenzó con el ballet Miramar y la potencia de los jóvenes de RaÍz y Canto.

Pero sin dudas, el momento más importantes estuvo dado por la elección de la Paisana: Guadalupe Aballay, secundada por un empate entre Viviana Marisol Castro y María Rocío Levis Barros, que quedaron como Primera y Segunda Paisanas respectivamente. En esa concurrida primera noche central tuvo además un cálido homenaje a una de las paisanas, Olinda Roco, recientemente fallecida. Tras la elección comenzó el desfile artístico, que tuvo como momento cumbre el show de Los Tekis, aunque el público no escatimó aplausos para Los Lucero de Jáchal, el Dúo Ruarte-Molina, Ballet Milagros del Tiempo, Canto Cuatro, Capuchón González, Los Serenateros y los Cuatro Cantores y sus Mariachis.