La sonrisa de la niña cuando un par de cubitos se transformaron en la cabeza de un robot, no tiene precio, como dice el eslogan de una tarjeta. Es que el creador del ya famoso juego de encastre parece hacer magia para los chicos que visitan el Yo juego, las actividades organizadas por Turismo en los jardines del Centro Amadeo Conte Grand. Nicolás Poliak es el diseñador industrial que ideó Qubic, que son pequeños cubitos de plástico que se unen entre sí, y decidió dejar el escritorio para salir al campo a enseñar a jugar con su invento. Y hasta San Juan llegó convocado por los organizadores del Yo, Juego, con un taller en donde la premisa es la imaginación, y los chicos tienen libertad para crear sus figuras. Desde las 15.30 hasta las 19 en grupos de 15 niños-mayores de 5 años- y durante poco más de media hora, van pasando al stand que está dentro del galpón del ex Ferrourbanístico y se sientan a la mesa donde los esperan las montañitas de piezas para ser combinadas.
Los varones hacen autitos, robots, y las nenas corazones, flores o más robots. Algunos habían jugado antes, para otros, era la primera vez y ahí estaban, concentradísimos. Tienen poco tiempo y después "desprenderse" de su creación es algo difícil, pero ¿quién les quita lo jugado?

