"Yo soy tango", dijo alguna vez. Y sin dudas que es así. Anoche, en el Teatro Sarmiento, Carolina Bettio mostró la sangre maleva que corre por sus venas, en el marco de la temporada de la Fundación Protea, cuya comisión decidió que lo recaudado en taquilla fuera a beneficio del Hospital de Niños Juan Carlos Navarro.
También conocida como Carolina San Juan -como se presentó en Miami, el 17 de abril pasado, en el Broward Center- , la intérprete subió a escena con su "Qué voy hacer!… si soy así!", un espectáculo de 2×4 en el que la acompañó el bandoneonista Carlos Nieto, el cantante cordobés Fernando Montero con temas como Tinta Roja y Pasional, la dupla de baile compuesta por Rosalía Alvarez y Nicolás Tobares, que le sacaron viruta al piso con sus cortes y quebradas; y los músicos locales Orlando Tejada en piano, Laura Vicentela en contrabajo y Esteban Calderón en bandoneón.
La cumparsita, fue el instrumental que abrió la función. Luego pasaron clásicos como Yira, Yira; Malena, Cantando y De mi barrio, entre otros, en la voz de esta pebeta sanjuanina radicada en Córdoba que tuvo varios cambios de vestuario y con su carisma se ganó a la platea, en su mayoría adulta.
Con compás compadrito y aire milonguero, Carolina demostró una vez más que "en cada verso pone su corazón", como dice la letra de Malena, del genial Homero Manzi.

