Expectante pero tranquilo, cuenta que esto que comenzará a vivir el martes próximo es "una gran oportunidad y un premio al esfuerzo, a tantos años de trabajo". Rolando Cabezas, un "seguridad" conocido en la provincia, a quien varios habrán visto en recitales de artistas nacionales y foráneos, será uno de los cinco argentinos que integrará el cerrojo VIP de Luis Miguel en su gira por Argentina -que comienza el 7 de noviembre en Corrientes-. Y también en algunos países de Latinoamérica. Dos "guardias" llegarán con el cantante, uno mexicano y otro de Estados Unidos; y aquí se acoplarán cuatro porteños y el sanjuanino, quienes serán parte del círculo más cercano, bajo la batuta de Marcelo Fernández.
"Yo estuve en la seguridad cuando Luis Miguel actuó en Ebano en 1999. Y de ahí quedó una buena relación con la gente de Buenos Aires, de mucha confianza", cuenta Rolo, a punto de viajar a Capital Federal para interiorizarse del operativo.
"Se ve en el momento, va rotando, pero puede que estemos junto a Luis Miguel o que vayamos de avanzada, o sea, nos adelantamos a los lugares donde va a ir él, y chequeamos hoteles, preparamos rutas, accesos, seguridad… es un gran despliegue y una gran responsabilidad…" explica Rolo, quien también ha puesto el cuerpo en presentaciones de Chayanne, Maná, Christian Castro, Ricky Martin y Alejandro Sanz -entre otros-; y que si bien hoy es un apasionado de lo que hace, comenzó a moverse en este terreno casi por casualidad.
Ex compañeros de rugby, el productor local Bebe Albarracín le pidió que le diera una mano con un show porque le faltaba gente. Fue el de Los Fabulosos Cadillacs, hace más de una década, en el Estadio Cerrado, y ahí le picó el bichito. Con el tiempo, este ex practicante de Kung Fu comenzó a perfeccionarse y tomó cursos en Capital, dictados por especialistas israelíes.
Grandote, intimidante y serio, Rolo se saca los anteojos oscuros de marca deportiva y entonces despeja el paso hacia su propia humanidad. Sencillo y amable, este urso de 37 años, que está en pareja y se enternece con su chiquito de un año y medio, reconoce que hoy puede vivir como custodia (sobre todo de empresas), pero que no siempre la pasó bien. "A veces estabas toda la noche y no veías un peso. Pero hoy tengo mi cachet, tal como me aconsejaron en Buenos Aires. Si querés algo bueno, pagalo", asevera sin soberbia Rolo, que reconoce que en este tipo de movidas internacionales se hace una buena diferencia económica. "Con estos shows ganás en 10 días lo que normalmente hacés en 6 meses", aflojará casi tan reservado como cuando se le pregunta por algún secretito de la farándula.
"Si vi alguno, ya no me acuerdo", sonríe, y se excusa diciendo que es justamente esa "mala memoria" (traducido, "ser sumamente profesional") una de las virtudes más valoradas en este rubro.
¿Si le gustaría ganar popularidad como Dany la muerte, el Apache o Tito, los ex "gatos" de Fort; o si prefiere pasar totalmente inadvertido? "Ni una cosa ni la otra. Un término medio", dirá.

