El jazz copará el Auditorio Juan Victoria esta noche, en la tercera función de abono de Mozarteum San Juan, que contará con el concierto de Brazofuerte. Reconocido en el circuito de jazz porteño, el conjunto creado por Juan Klappenbach hará pie en la provincia por primera trayendo su versión del jazz tradicional y el swing. Con Louis Armstrong como una de sus influencias más notorias, el conjunto formado por Tavo Doreste (piano), Eduardo Manentti (trompeta y trombón), Marcelo Gallo (trompeta y trombón), Guillermo Arrom (guitarra y banjo); Hernán Avella (batería); Nicanor Suárez (contrabajo) y Klappenbach, (que en esta ocasión será reemplazado por Orlando M. Merli) recibió en 2015 el Konex a la mejor banda de la década.
Con dos álbums editados, Swingin’ party (2013) y Vivo en Thelonious (2017), la banda mostrará lo mejor de su repertorio con el estilo que los caracteriza y distingue. "La banda tiene manera amena de comunicarse con el público, con un sentido del humor explícito. Intentamos remarcar un poco ese sentido, más que nada el estado de ánimo en el que nosotros presentamos esta música y hacia donde la encaramos. Después la música habla por sí sola", explicó a DIARIO DE CUYO Nicanor Suárez, quien además compartió las expectativas que tiene de tocar en el Juan Victoria por las virtudes de la sala.
-¿Cómo es el show que traen a San Juan?
Hacemos música tradicional, de la década del ’30 y swing, estilo de jazz con muy buena llegada al público en general, tiene que ver con los orígenes bailables de este estilo, eso lo hace contrario a lo que mucha gente imagina del jazz, es un estilo mucho más accesible de lo que la gente cree. La propuesta es llevar parte de nuestro repertorio, grabado en nuestros dos discos de estudio, hacer la gente pase un lindo momento de concierto.
-Y Louis Armstrong los inspira desde el nombre.
-Sí Armstrong en inglés es brazo fuerte, sin saberlo nosotros, hay una anécdota anterior: en la Segunda Guerra mundial, cuando estaba Mussolini en el poder en Italia, se prohibía toda música foránea y nos contaron que para editar los discos de Louis Armstrong, salían como "Luigi Braccio forte". Así que no somos tan originales, pero sí es en homenaje a Armstrong.
-¿Qué significó para ustedes ganar el Konex?
-Para nosotros fue una sorpresa, porque este premio se da cada 10 años a la música popular, premia los últimos 10 años en esa terna. Nosotros compartimos la terna con otros tres grupos de muchísima trayectoria, históricos dentro del jazz, así que para nosotros haber ganado un premios de esas características, de tanto prestigio y entre históricos del género fue una sorpresa, cómo una banda tan nueva en ese momento pudiera acceder a eso. Significó mucha alegría y una motivación muy grande para seguir trabajando y profundizando en el camino que seguíamos.
-¿Qué escenarios resaltás de los que han visitado? ¿Tienen pensado tocar en el exterior?
-Tocamos fundamentalmente en Buenos Aires, en todo el circuito de jazz, en Festival de Jazz de Buenos Aires, nos convocan siempre; en el Festival de Cine de Mar del Plata… Estamos creciendo todavía. En el exterior todavía no tuvimos la oportunidad, por distintos motivos, es algo a lo que nos estamos abocando, con la idea de hacer pie en Brasil, Chile y México.
-¿Cómo definís al público de Brazofuerte?
-El público que tenemos es sumamente heterogéneo, desde gente muy joven que se acerca por el baile, o por inquietud por esta música, hasta personas mayores. También por el repertorio que hacemos, hay gente de todas las edades, no podría segmentarlo porque no funciona así. Justamente una de las características del jazz que hacemos es que es para todo tipo de público y esto no es una propaganda, es real, no porque lo hayamos inventado nosotros, sino porque es una característica del jazz que hacemos.
-¿Cuál crees que es el lugar que ocupa hoy el género?
-El jazz no es una música masiva, lo fue, pero en 1930. Desde 1940 a esta parte dejó de serlo. Lo que sí, perdura en el tiempo, las propuestas se siguen renovando, independientemente de la estética de esas propuestas, algunas más contemporáneas, otras más tradicionales… y lo que permite que siga estando viva esa música y sintiéndose actual es el hecho que es una música donde la improvisación tiene un papel fundamental, el músico tiene la oportunidad de expresarse libremente. Es un músico que vive hoy también rodeado por el reggaeton y esas cuestiones… el jazz es una música actual no masiva. Está sumamente vivo el género.
-¿No necesita entonces masividad?
-No lo necesita porque no lo es. Aunque sí le vendría bárbaro, creo que a todos nos vendría bárbaro, pero eso ya tiene que ver con la difusión no con el género.
-¿Qué rol cumplen para ustedes las plataforma digitales?
-Estamos en todas las plataformas, fundamentalmente es una cuestión de difusión, solamente tienen sentido de difusión. No son rentables, ahora la gente deja de comprar discos y por un abono mensual, en el mejor de los casos, tiene al acceso a todos los discos que quiera. Es imposible que sea rentable. Por eso, es difusión que se traduce en público; el ingreso de los músicos tiene que ver con los shows en vivo.
EL DATO
- Brazofuerte. Hoy a las 21.30 en el Auditorio Juan Victoria. Función de Mozarteum. Entradas: $500, $350 (jubilados), $250 (juveniles) en oficina de Mozarteum: Av. Ignacio de la Roza 161 oeste – Local 5-, y boletería de la sala.