Aunque desde hace más de un año que dejó atrás sus tiempos de pediculosis rockera, Ciro volvió a hacer roncha utilizando como aguijón los éxitos de su pasado para inyectar su nuevo proyecto musical en las membranas de unos 800 seguidores, el domingo pasado en Hugo Espectáculos y a lo largo de tres horas.
En medio de hits piojosos como Tan Lejos, Todo pasa, Ruleta, El Farolito, Desde lejos no se ve y Genius; interpretó algunas de sus flamantes composiciones como Antes y después, Vas a bailar y Espejos; en un tono más romántico, a veces más soft y más jazzero.
Sacudiéndose y haciendo guiños cómplices a una banda que suena madura y sostenida, el cantante presentó al guitarrista estadounidense Jimmy Rip a quien invitó a "probar vinos en Cuyo", como dijo a DIARIO DE CUYO.
Con varios cambios de vestuario, Ciro pasó de la remera negra rollinga, a un frack al mejor estilo rockstar para evocar los tiempos de las orquestas típicas con un bloque teñido de jazz, y se calzó campera negra para despedirse con un batido de rock and roll. El público, la mayoría jóvenes, dio el visto bueno a este Ciro renovado, que ya no es un piojo cualquiera, es un piojo persa.

