"De pronto, saltó una chispa de intuición en aquel silencio sepulcral y encajaron todos los detalles. Algo que Edward no quería que supiera. Algo que Jacob no me hubiera ocultado. Algo que había hecho que los Cullen y los licántropos anduvieran juntos por los bosques en peligrosa proximidad. Algo que, de todos modos, había esperado…". Así, Bella (Kristen Stewart) vuelve a ser el centro del universo en Eclipse, la tercera parte de la cada vez más oscura y tormentosa saga de Crepúsculo, cuyo avant premiere será este miércoles a las 23 en el Holiday Cinemas, a la misma hora y el mismo día que en todo el mundo (las entradas pueden adquirirse de manera anticipada).
Tras su estreno mundial en el Teatro Nokia de Los Ángeles el fenómeno teen regresa a la pantalla con Stewart, Robert Pattinson y Taylor Lautner, bajo la dirección de David Slade.
La muerte continúa olfateando la dulce yugular de Bella, mientras ella se plantea firmemente dejar de ser una simple mortal para pasar una eternidad junto a su pálido príncipe de las tinieblas. Este es el eje del relato basado en la franquicia literaria de Stephenie Meyer que ya vendió más de 70 millones de ejemplares en 37 idiomas.
Pero, no todo es amor y rosas. El ritmo cardíaco de la historia se acelera con la presencia de una horda de vampiros sedientos de sangre.
Tras el éxito de Twilight -su nombre original-, los escritores se concentraron en los personajes con colmillos y también aprovecharon el filón las series de TV, con True blood (HBO) o The Vampire Diaries (Universal).
Pese a esto, el cine se muestra reticente a la moda sanguinolenta. Después de Crepúsculo, nada logra ponerse a su medida -como el frustrado intento de Cirque du Freak. The Vampire’s Assistant-.
Lo que da a pensar que la clave no sean los vampiros sino la trama. Como muestra basta un botón. En números, Crepúsculo recaudó 408 millones de dólares; y Luna Nueva hizo punta con 709 millones situándose en el puesto 38 de las más taquilleras.
Los productores se frotan las manos. Ante las millonarias expectativas de ingresos, decidieron hacer la gran Harry Potter y dividir el último y cuarto libro en dos films. Así, Amanecer, llegará al cine en 2011 y 2012. Claro que no sería un punto y aparte. La continuidad vendría en 2013 con la adaptación de otro libro que lleva la firma Meyer, se trata de La segunda vida de Bree Tanner, protagonizado por una vampirita creada para acabar con Edward y Bella que debuta en Eclipse.
El romance, ya sea real o ficticio, entre Pattinson y Stewart, hace soñar a los fans con la posibilidad que la realidad supere, de nuevo, a la ficción. Y sobre todo, vende…¡clink caja!.