Luisana Lopilato y Joaquín Furriel estarán a cargo de los roles estelares en La corazonada, primer film argentino producido por Netflix que hoy se estrena en la misma plataforma. Dirigido por Alejandro Montiel, el largometraje sitúa a la agente policial Manuela "Pipa" Pelari (Lopilato) en otra escena de un crimen. Es que esta producción es la adaptación de un libro policial escrito por la periodista Florencia Etcheves, al igual que Perdida, anterior film a cargo de Montiel y con Lopilato como protagonista, que se estrenó en los cines nacionales y del que es su precuela.

En esta circunstancias, el caso con el que el personaje de "Pipa" hace su ingreso a Netflix, guarda similitudes con el de Solange Grabenheimer, asesinada en enero de 2007, por el que fue acusada su amiga Lucila Frend, absuelta en un juicio oral y público. 

Así, en este capítulo, Lopilato es una joven que está dando su primeros pasos como investigadora y, junto con Francisco Juanez, un controversial inspector de la división de homicidios (rol a cargo de Furriel), tendrá que resolver el violento asesinato de una chica de 19 años que tiene como principal sospechosa a la mejor amiga de la víctima. En paralelo, la protagonista tendrá la difícil tarea de analizar en secreto el homicidio de un hombre en el que su jefe Juanez, parece ser culpable.

"Para nosotros, como actores, saber que la película se va a estrenar en 190 países al mismo tiempo y, que más allá de todo lo que está pasando en este momento, nos podamos juntar a tal hora y verla todos al mismo tiempo es una muestra de que la tecnología hace que los tiempos se acorten’, comentó Lopilato acerca de esta nueva oportunidad de llegar a las pantallas y hacer su primer escalada en la famosa plataforma.

 – ¿Qué tipo de expectativa hay cuando el estreno de la película se da por streaming? ¿Hay que acostumbrarse o es lo mismo que si fuera en salas de cine?

– Luisana Lopilato: Creo que es diferente porque esto del coronavirus, que está pasando mundialmente, te separa de estas cosas que existen cuando estás por estrenar una película. No podés estar cerca de tus amigos y tu familia, de invitarlos a la premiere y todo eso que te perdés con la gente con la que hiciste la película. Son cosas lindas y momentos que hacen a una película, y eso se pierde un poco.

– Jaquín Furriel: Coincido en relación a que los hechos del confinamiento no da otra opción que estrenarla así, como muchas otras películas que se hubieran estrenado y tuvieron que demorar sus fechas de estreno.

– ¿Cómo viven la tensión entre el cine en salas o a través de una plataforma?

– JF: Por ejemplo, el Festival de Cannes, es un lugar que históricamente dictaminó un poco lo que está bien y lo que está mal; pero las plataformas están democratizando eso y los festivales cada vez tienen menos incidencia sobre los gustos de la gente. Lo que te gusta está menos controlado y esto se potenció con la pandemia.

– ¿Hacer una producción de este tipo para Netflix es al nivel de una película o es más parecido a un telefilme?

– LL:  Te puedo decir que en este caso no tuvo diferencia. La verdad que lo viví igual. Sin ir más lejos, el grupo que se formó es un grupo que hace cine: tanto los camarógrafos como la de luces es gente de cine. Con respecto a que sea una producción de Netflix, puedo decir que me ha pasado de trabajar con otras productoras y no es tan organizado. La verdad que, trabajar con una empresa tan grande como Netflix, con personas muy profesionales, hizo que las cosas pactadas se cumplan y eso, para nosotros, que además de ser lo que somos también tenemos nuestras vidas ocupadas con hijos y organización familiar, realmente ayuda. Un equipo que está ordenado y sabe bien lo que va a hacer, te ayuda para tu organización familiar.

– ¿Cómo se sienten haciendo personajes que se pueden definir, como oscuros? 

– JF: Son personajes que están mucho en el género y funcionan muy bien. Son los típicos héroes rotos, que tienen una especie de heroicidad bastante polémica por momentos. Pero bueno, no son personajes por los que sentís un rechazo o algo, sino que te hacen entrar en contradicciones, porque no llegás a conocer del todo cuáles son las intenciones. Ese es el género también: el enigma, el misterio, lo que los personajes no dicen.

– LL: En La Corazonada, tuve la posibilidad de trabajar con un coach y eso me ayudó un montón. Me dio la seguridad de poder ir al set relajada y en paz, sabiendo que conocía a la perfección la letra y podía poner la energía en otras cosas, como dónde me iba a parar y cómo iba a agarrar lo que iba a agarrar. Es difícil, porque la gente me tiene muy relacionada con Casados con hijos y, salir de ahí, es un conjunto de muchas cosas. Como actriz, necesito cambiar vestuario, cambiar de look; porque la cara es la misma, pero hay que buscarle cositas al personaje, cómo camina y cómo es, para diferenciarlo bien de lo que es Luisana y lo que es Paola Argento. (Telam)

Dato

Esta nueva película, que pone a Lopilato nuevamente en el papel de "Pipa", se estrenará en 190 países al mismo tiempo.