El director ejecutivo del Instituto Nacional del Teatro, Marcelo Allasino, estuvo ayer en San Juan y en la sede de la representación local, que tiene a su cargo actualmente Cristina Castro, tomó contacto con los teatristas locales, como parte de las reuniones que realiza en todo el país. También completó un paso administrativo importante del nuevo espacio Títeres en Serio, gestionado por la compañía del titiriterio David Gardiol, cuya construcción fue financiada con fondos del plan nacional de infraestructura, implementado por la nueva gestión del INT. "Es una sala fabulosa. Me quedé sorprendido, muy linda", dijo a DIARIO DE CUYO el funcionario, que llegó acompañado por tres directores de áreas técnicas del organismo.
-Hubo mucho revuelo el año pasado, críticas y algunos hablaron de recorte de presupuesto, ¿qué hubo de cierto?
-El año pasado tuvimos un año muy crítico, con situaciones muy complejas, así que ahora queremos acercarnos a la comunidad y poder hablar cara a cara y poder compartir información.
Se dio una crisis, que ya es cíclica en el instituto, y que tiene que ver con esta tensión que hubo de algunos consejeros y los distintos directores ejecutivos del organismo. Se habló de recortes presupuestarios y la realidad demuestra que fueron rumores infundados, porque llegó diciembre y no solamente tuvimos la incorporación de todos los activos financieros del organismos, sino que tuvimos 25 millones más por mayor recaudación. Llegamos a los 100 millones de pesos de incremento.
-¿Por qué no sesiona el Consejo de dirección?
-Lo grave que estamos teniendo en el Consejo es que no se está pudiendo constituir, porque dos funcionarios tenían incompatibilidad de cargos, uno era el representante de esta región, que es de San Luis, Gabriel Arias, que solucionó la cuestión tomando licencia del otro cargo. El otro es el ex representante de Santa Fe, que era el representante del área Centro y Litoral. Pasado un tiempo, a él se le dio la baja. La conformación del Consejo está establecida por la Ley Nacional del Teatro, no lo invento yo. Al quedar cesanteado el representante de una región, las provincias debían elegir un nuevo representante, que es lo que no hicieron, se resistieron a elegir el representante, en rebeldía desde mi punto de vista.
¿En qué situación está el INT hoy?
Tuvimos grandes avances en cuanto a la fiscalización de los recursos. Esa era la debilidad más grande del INT. Uno de los problemas graves era la falta de fiscalización de los recursos, había proyectos sin rendir que databan del 2006, 2008, en todo el país. Logramos dar un salto cualitativo en todo el país. Otro problema era el modo de gestionar los programas del instituto, que hasta nuestra llegada se hacía por intermediación de una ONG. No estábamos de acuerdo por la falta transparencia que generaba eso, por eso incorporamos la gestión directa con el INT para todos sus programas. El tercer problema tenía que ver con una situación endogámica, en un organismo de 20 años de trayectoria había ciertos nombres que circulaban desde entonces por distintos cargos del organismo.
¿Cómo ve a San Juan tras el cambio de representante?
-Era un cambio absolutamente necesario, Ariel (Sampaolesi) estuvo todo el tiempo que pudo estar como representante provincial. El cargo, por reglamento, tiene cuatro años de vigencia, y puede ser reelecto por cuatro más. Ese fue el caso de él. Cristina (Castro) viene de otro campo, que tiene que ver más con la docencia, lo académico, lo reflexivo; Ariel venía más del hacer. Eso se corresponde con los perfiles que pueden tener. A Cristina le tocó la ardua tarea de producir el recambio en la gestión provincial después de una gestión muy fuerte, muy presente de Ariel. Lo saludable es que pueda existir renovación.
-En la primera reunión que tuvo aquí no lo recibieron muy bien…
-Algunos, otros sí me recibieron bien. Eso ocurre siempre en todas las reuniones dado que yo represento un cambio de paradigma que le hemos impreso a la gestión, obviamente genera posturas diferentes. Quienes más se quejan en las reuniones son los que han tenido algún vínculo cercano con las gestiones provinciales. En esa reunión, que fue hace un año y medio más o menos, sí, los ánimos estaban exaltados de parte de algunos allegados a la gestión de Ariel. Pero es parte de la tarea. Nosotros hacemos un gran esfuerzo por compartir información que antes estaba vedada o en manos de pocas personas. Y también hacemos el esfuerzo de sentarnos y poner la cara para hablar con los hombres y mujeres del teatro argentino. Yo vengo de ese campo, soy artista, me desarrollé como tal durante décadas y soy un gestor independiente en primer lugar, así que conozco muy de cerca las necesidades del sector.
"A Cristina Castro le tocó la ardua tarea de producir el recambio en la gestión después de una gestión muy fuerte, muy presente de Ariel Sampaolesi. Lo saludable es que pueda existir renovación".
Contacto con la comunidad local
Una veintena de actores y directores asistieron a la reunión con el director ejecutivo del INT, Marcelo Allasino. El funcionario tomó gran parte de su tiempo en explicar en detalle la razón por la que no sesiona el Consejo Directivo, lo que frena la distribución de fondos para subsidios, becas y otros ítems, dijo. Ejemplificó la situación con un dato que ya había sido revelado en comunicados el año pasado. "Es un papelón que por una puja de intereses no se conforme el consejo y el teatro pierda 80 millones de pesos" que no fueron ejecutados y volvieron al Tesoro.
Los artistas locales hicieron planteos diferentes, algunos coincidieron en "la crisis" que atraviesa el sector en la provincia, otros reclamaron que el INT "no está funcionando", o que no se cumplió con la creación de foros regionales que él mismo había anunciado en su visita anterior. Allasino dijo que no encontró eco en los propios representantes provinciales que debían ser los promotores de esos espacios de discusión.
En un clima de cordialidad, la reunión permitió el intercambio de información y de consultas técnicas con los directores del INT que también viajaron.
Nueva sala, papeles en regla
Ayer por la mañana, en la Escribanía Mayor de Gobierno provincial, se firmó la hipoteca por 20 años de la sala que está construyendo la compañía de David Gardiol, Títeres en serio, financiada por el INT. "De esta manera se garantiza que el edificio se use como sala teatral durante los próximos 20 años, seguramente eso va a transformar la realidad teatral de toda la comunidad", apuntó el funcionario nacional.