Entre paredes de ladrillos, Pocho le habló a sus compañeros de la banda: ’66 millones para cada uno… ¿alguna pregunta?’, así los entusiasmaba para que sueñen con un suculento botín por repartirse si logran el gran golpe. Robar una joya valiosa del museo a toda costa, esa es la misión de estos malandras sin suerte, porque ‘lo último que se pierde… es la esperanza’. Con ver el tráiler del cortometraje ‘La esperanza’ aparecen indicios de una puesta audiovisual entretenida y con impecable nivel técnico. Esta pequeña historia creada por egresados de la Escuela Nacional de Experimentación y Realización Cinematográfica de la Región Cuyo (ENERC) logró abrirse paso a un circuito de festivales internacionales de cine con buenos augurios y distinciones. Este corto en clave de sátira de 12 minutos de duración, fue realizado íntegramente en la provincia -con las escenas importantes en el Museo Franklin Rawson- por el equipo novel integrado por Abril Armendáriz, Juan Cruz Izco (en producción), Valentín Soler (dirección), Renzo Quiroga (asistencia y montaje), Sol Segura (fotografía), Leonardo Francini (sonido) y Marlén Jofré (arte).
La propuesta, logró entrar a la Selección Oficial del Festival de Cortometrajes ‘La Última Escena’ en Ecuador, contando con su estreno en aquel país hace un par de semanas. Más con el antecedente previo de haber sido proyectado en la muestra de ENERC en la pasada edición del Festival de Mar del Plata (en noviembre último) resultan hechos significativos para el grupo sanjuanino que marcan un punto de partida importante para que más y nuevos audiovisuales provinciales empiecen a tener una dinámica fluida en espacios y pantallas importantes en el exterior. Por otro lado, este material servirá como una carta de presentación de los profesionales locales ante productoras y proyectos de mayor envergadura. ‘Una compañera del equipo nos propuso ir al festival, probamos suerte entrar al concurso, quedamos seleccionados y nos abrió las puertas para que otros profesionales vean de qué manera trabajamos y qué podemos conseguir’, dijo Juan Cruz. El productor resaltó además, con una gran cuota de voluntad, profesionalismo y capacidad para resolver necesidades artísticas, el equipo y el elenco, pudieron lograr un buen producto: ‘a pesar de contar con recursos limitados, una realidad problemática para hacer cine, con presupuestos reducidos, la ayuda de colegas, de familiares y de una larga lista de instituciones y la propia escuela que nos brindó los equipos de grabación, logramos hacer magia, esa magia del cine. Que también fue posible por la entrega de los actores y actrices. Fue una experiencia emocionante para todos. Así vivimos esta magia que se crea, detrás y delante de la cámara’. Para lo que viene, el equipo realizador espera concretar el estreno para el público provincial para mediados de este año. También se aguarda para este 2024 participar en otros festivales y muestras en el exterior.