Un viaje en el tiempo. Eso fue lo que sucedió cuando pisaron el escenario los once músicos que integran las filas de La Porteña Jazz Band y el sábado pasado hicieron vibrar la sala del Auditorio Juan Victoria, que se mostró colmada en lo que fue la tercera función de abono de Mozarteum Argentino filial San Juan.
El humor y el swing propio de la década del ’20 y el ’30 fueron los condimentos fundamentales de la PJB. Claro que, otro preciado elemento que lleva consigo el conjunto es su tinte didáctico. Con anécdotas y algo de historia, el conjunto recorrió las raíces del jazz y también del blues al tiempo que interpretó clásicos como Estoy loco por mi chica, la conocida melodía de Polvo de estrellas (de M. Parish/H. Carmichael), Caravana y El borracho (de Duke Ellington), y otros tantos hits que salieron de las penurias y las alegrías de los negros esclavos que llegaban a Nuevo Orleans y aún mantienen su vigencia, en pleno siglo XXI.
