El Stand Up, género teatral norteamericano de humor, florece cada vez más en la provincia. Cada fin de semana, la noche se viste de humor con una cantera de comediantes sanjuaninos que no tiene techo. Todo comenzó cuando Federico Marzano, un humorista mendocino abrió ‘El Club de la Risa’, que de allí surgieron los primeros comediantes del género en 2013. De aquella primera camada, nació el grupo ‘Bla Bla! Stand Up Comedy’, con Alejandro Flores, Betty Zamora, Ana Guirado, Norma Sánchez, Armando Saputo, Daniel Torres y varios más que conforman un staff estable de 16 personas. Desde el mismo núcleo del ‘Club de la Risa’ hubo otro grupo, pero más informal y abierto que logra espectáculos con comediantes que son invitados, bajo el título de ‘Circus Comedy’, entre ellos figuran Luis ‘Chichón’ Hernández y Liliana Orelo.

Actualmente hay cerca de 25 comediantes que realizan prácticamente casi 4 funciones al mes. No solo se animan a dar un giro artístico aquellos que vienen con experiencia en teatro o artes escénicas, sino también personas que tienen profesiones alejados de las tablas: trabajadores, amas de casa, estudiantes o comerciantes. ”El standapista busca sorprender. Nos reímos de nosotros mismos, no del público’, señaló Daniel Torres. Los primeros shows, tuvieron una base de 50 espectadores en bares pequeños hasta que en el Primer Festival de Stand Up, que tuvo lugar a fines del año pasado en el Teatro Municipal, lograron una convocatoria de 450 espectadores. ‘El monologo de Stand Up, como discurso humorístico está basado en cosas que nos pasan en la vida cotidiana. Usamos la exageración, la comparación, el absurdo para el conflicto y la contradicción humana’, explicó el periodista Alejandro Flores. Los temas son inagotables para un standapista. El desafío no es repetirse. Los monólogos deben actualizarse a las circunstancias del lugar, el tiempo y el contexto. Pero la herramienta principal -todos lo afirman- es el poder de la observación.

Liliana Orelo, por su parte sostiene que ‘Poner humor a las experiencias personales es más difícil que hacer teatro. Es un recurso que nos agiliza la mente y la memoria. Hay que saber defender el texto y bancarte lo que venga’. Mientras que Chichón opina que el Stand Up sanjuanino está en fase de desarrollo: ‘Todavía estamos dando las primeras gateadas. El problema de los comediantes sanjuaninos, es la poca rotación del público local, entonces estamos obligados a escribir nuevos monólogos. Pero pregunto: ¿En qué momento maduramos nuestros textos y maduramos nosotros como comediantes? Sueño que cada sábado haya tres shows simultáneos en diferentes espacios. Para que eso ocurra, debe haber entre nosotros humildad y generosidad, porque hay suficientes comediantes para lograr esta meta’, sostuvo el cantautor y músico.

Pero San Juan también tiene comediantes que son las ‘embajadoras’ que plantan la bandera del humor sanjuanino en otras latitudes. Es el caso de Melina De Bernardo y Vania Rojas en Córdoba; Valeria Far Fan en Buenos Aires y Carli Coria en Mendoza.

‘El Stand Up sanjuanino es curativo. Funciona y te pone en un lugar más fuerte. Es el nuevo parripollo (risas) porque te obliga esforzarte y exigir monólogos de mayor calidad’. Carli Coria quien hace dúo con Melina en ‘Las Inmunes’ y trabaja junto a Sebastián Ozdoba en I’mpro (improvisación teatral), considera que el Stand Up no es una moda pasajera: ‘Es un fenómeno que se instauró para quedarse. Toca temas personales que les puede pasar a cualquiera, contado desde el humor. Dice cosas que concientizan, no solo hacer reír’. Ozdoba, un buen conocedor de la materia y da el remate justo: ‘Es un rubro que no tiene fecha de vencimiento. La gran familia del humor cuenta con monologuistas, cuentitas, narradores, cómicos, clowns. En el Stand Up, la clave es hacer humor con lo que la gente hace y no con lo que es’.