Es una chica de perfil bajo, pero su apellido la coloca en la mira todo el tiempo y no siempre para bien. Algo de eso debió soportar recientemente Paris Jackson, la hija del Rey del Pop, a quien algunos fanáticos enfermizos de su padre y ocasionales haters atacaron cibernéticamente por no haber mostrado en redes o compartido con ellos alguna celebración dedicada a Michael el 29 de agosto, día que el astro fallecido en junio de 2009 hubiera cumplido años. La joven modelo, actriz y cantante de 25 años, que sufrió depresión en su adolescencia, quedó azorada por el nivel de agresividad manifestado, ya que se tomaron la atribución de echarle en cara que no amaba a su padre y hasta le desearon la muerte.
"Cuando estaba vivo, él odiaba que la gente le recordara que era su cumpleaños. No le gustaba que lo felicitaran, ni festejarlo, nada de eso. De hecho, nunca quería decirnos cuándo era su cumpleaños para que no le organizáramos ninguna fiesta", ensayó una suerte de explicación la joven ante tanto reclamo. Pero también se permitió reflexionar en voz alta sobre una tendencia muy actual: "Parece que si no felicitas a alguien vía redes sociales, significa que no le quieres lo suficiente, que no te importa (…) Básicamente, miden el amor que siento por mi padre en función de lo que publico o no en Instagram", escribió visiblemente ofuscada con algunos habitantes de la red.
LOOKS
Bella y famosa, la única hija del Rey del Pop ha marcado tendencia desde su más fresca edad. Su incursión en el modelaje acentuó su influencia.