Sin velorio previo y con la presencia de sus familiares, afectos íntimos, compañeros de trabajo, múltiples medios y gran parte de la prole artística -y la dolorosa impotencia de sus padres Cris Morena, Gustavo Yanquelevich, su hermano Tomás y su esposo Darío Giordano (sin sus tres hijos)-, ayer a las 15.30 inhumaron en un cementerio privado de Pilar los restos de Romina Yan, la querida actriz de Amor Mío que falleció el martes a los 36 años en el Hospital Central de San Isidro y a raíz de un paro cardiorespiratorio -aunque todavía no se confirmó la causa del mismo-.
Su repentina muerte (ocurrida a las 17.25), además de provocar impía sorpresa, consternó al ambiente y provocó una numerosa adhesión de afecto de sus pares. Así y mediante una estricta ceremonia privada -a pedido de Cris y Gustavo-, se registró el apoyo de Susana y su hija Mecha (inamovibles desde que recibieron la noticia), Mirtha Legrand, Tinelli y sus productores, Emilia Attias, Guillermo Francella, Pablo Echarri, Nancy Duplaá y Adrián Suar, entre otros. Pero las condolencias se multiplicaron en las redes sociales (miles y miles en Twitter y Facebook) y muchos programas levantaron sus ciclos en vivo y cedieron su espacio (ver aparte). Intrusos, el programa de Rial -que manifestó su pésame desde Italia-, trasmitió (como la mayoría de las señales) el minuto a minuto del entierro, postal dark que registró, por ejemplo, a las conmovidas Maru Botana y Andrea Del Boca. Por su parte, El Negro Oro dijo que "cuando la vi a Cris (Morena), vi la más trágica figura del dolor. Me abrazó y lloró". "No voy a escribir nunca más, Negrito", le habría dicho la exitosa productora en medio de las lágrimas. Desolación que incluyó un homenaje de fans que peregrinaron desde el obelisco hasta el Gran Rex (escenario que la vio brillar con sus tiras infantiles) y un eco de aflicción a nivel internacional.
Opinión local
Consultado sobre el sorpresivo deceso de Yan -sin trascender aún los resultados de la autopsia- el médico sanjuanino Julio Aníbal Allende, del Instituto Privado de Cardiología (Mat. 1091) compartió una posible hipótesis sobre la causa de fallecimiento.
"Creo que lo de ella es una muerte súbita porque reúne las tres características de la misma: Primero, la muerte en una persona sana o aparentemente sana. Segundo, es una situación inesperada. Y tercero, desde el primer síntoma hasta la muerte no pasaron más de dos horas". ¿Cuáles son los detonantes? "La muerte súbita puede ser por una aneurisma cerebral, que es una cosa frecuente, pero eso lo determinará la autopsia". Ante las versiones de anorexia, bulimia y vigorexia que siempre merodearon a Romina, el profesional dijo que "el exceso de la actividad física, la bulimia y la anorexia son coadyuvantes, no la causa directa. Hay que sumar los hechos".