"Me gustaría decir que, en varios lugares, pusieron palabras que nada que ver, como que estaba furioso y enojado. Cabe aclarar que eso no fue premeditado por ellos, el Gobierno siempre pone música para cerrar sus actos y me parece genial, no es que se adueñen de las canciones sino que buscan temas que tengan que ver con su ideología". Contundente, tal como se muestra arriba y abajo del escenario, se mostró Ciro Pertusi a DIARIO DE CUYO, previo a la tocada que dará hoy en San Juan (VER APARTE), en referencia a su protesta por el "uso proselitista" de su tema Donde las águilas se atreven, que utilizó la TV Pública para cerrar la transmisión del discurso de la presidenta Cristina Kirchner en el Congreso. Las palabras que escribió en Facebook hicieron que la disputa creciera como bola de nieve y, al respecto, dejó en claro sus ideas y se pintó como un músico que pretende que sus canciones "lleguen a la gente".
– En este momento, la gente está muy agresiva, muy a la defensiva, muy dividida. Unos pueden interpretar una cosa y otros, otra; y la canción, justamente, habla de que todos estemos unidos y tiremos para adelante. Por eso no me cayó en gracia que se lo utilice en un acto político.
– El que me conoce sabe que tengo mis ideas y porque el otro tenga otra manera de pensar, no lo voy a destruir; al contrario, quiero coexistir, eso nos nutre. Cuando salí a explicar eso en Facebook, después de que la canción sonó al cierre del discurso de la Presidenta, quizás se malinterpretó como que estaba de un lado y no del otro. Siempre digo a mis fans: "Sepamos respetarnos, si a vos te gusta una idea política y a vos otra, a vos una música y a vos otra, a vos una forma de practicar el sexo y a vos otra; está todo bien".
– No. Lo que sí, algunos seguidores acérrimos están un poco fanatizados y no entienden que no soy como esos opositores en piloto automático que andan chicaneando. No saben mi historia, no entienden que me la pasé luchando para que no existan divisiones y por eso saqué Donde las águilas se atreven.
– Fue simplemente una expresión y a mucha gente no le gustó ni medio. Me comí unas agresiones bárbaras, pero no de mi público, porque ellos saben que no soy de esos mala leche que buscan desunir. Fui muy ingenuo, publiqué eso en el muro de Jauría para que lo leyeran los fans, para que no me dijeran: "¡Eh cómo diste tu canción para el cierre de campaña del Frente para la Victoria!", para decirles que no tenía nada que ver y que no me gusta que se utilicen mis canciones de manera política, como ya lo hizo el Frente de la Izquierda también.
– Quiero sacar mis canciones de este momento de violencia. Estamos en una época en la que te señalan con el dedo y hay hasta linchamiento público. No es pecado no identificarse con este modelo. Así como hay quienes sí lo hacen, está lleno de gente que no; y si yo acepto la realidad como está, aceptenme a mí. ¿Por qué no aceptar a aquellos que no quieren que sus canciones estén fuera de toda movida política? Yo pateo las calles con el pueblo, todos los días.
– Creo que el Gobierno debería hacer una mirada autocrítica en ese aspecto. Mal que mal, las ideas de un país mejor, las tenemos todos. Pero hay formas de comunicación que caen mal, hay que tener delicadeza. Pienso que los instruidos, los políticos, sean del partido que sean, no tienen que entrar en una reyerta como si fueran ciudadanos comunes en la tribuna de un estadio. Si aspiramos a ser del primer mundo, tenemos que respetar al prójimo y sus diferentes ideas.
– Como siempre, aquel que se identifique o muestre simpatía con un modelo, sea cual sea, va a tener mayores beneficios que aquel que no.
– Siempre pasó, lo que sucede es que ahora es mucho más evidente. Mucha inclusión, pero al final, el que no opina igual, queda excluido, está apuntado como enemigo público número uno.
– Y sí, porque entra el que está de acuerdo, eso pasó toda la vida. Contra todo eso hay que luchar.
– Soy una persona positiva. Hay que utilizar mejor lo que se hizo bien y no repetir lo que se hizo mal, para ir por lo mejor. Si nos quedamos en la que hacen todos y levantan todo, no va.
– No pasa nada, la canción ya está usada. Pero, por favor, traten de dejar la canción para la gente. Para los que me dijeron que yo no podía prohibir eso, les contesto que prefiero que no lo hagan en un acto político, pero que hagan lo que quieran (risas)… En definitiva soy un punk que se revela en contra de esta maroma, en la que no sé quién nos impuso que debemos estar enfrentados, que la vida debe ser Boca o River.