El ex "Agujerito sin fin" dejó a un costado sus monerías parlanchinas y criticó a la televisión actual. Es que el hiper familiar e histriónico presentador de "Justo a Tiempo" -ver recuadro-, ante la invasión de "tetalandia" -es decir, la excesiva proyección de cuerpos que propone Tinelli en Bailando y su mochila de peleas-, recalcó el porte vacío de soez de su programa y destacó lo de "podés juntarte con tus hijos a verlo". Tanto, que Weich afirmó que en "la televisión de hoy" ciclos tan costumbristas como el suyo, en pleno prime time -el horario central y de mayor encendido del día- se edifica como "raro" porque "no te obliga a cambiar de canal". El gracioso actor -ahora sin la compañía de la embroncada Zaira Nara que desertó, se pasó al polémico certamen de baile y le tiró palos-, repasó las artistas de "Justo a Tiempo" y delineó su disfrute, la competencia, el rating, la sombra del Mundial y el recuerdo de "Un sol para los chicos".
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– Lo que más disfruto es la posibilidad de que se pueda ver en familia, porque podes juntarte con tus hijos a verlo y, te puede gustar o no, pero al menos no le va a hacer daño ni te va a obligar a cambiar de canal. Eso en la televisión hoy día es raro, pero me encanta que pase eso.
– En mi horario no hay un programa de entretenimiento en el cual la gente llame para ganar premios, mi programa siempre es igual, no es que lo cambiamos en cierto horario por lo que sucede en los otros canales.
– Tengo que hacer un programa de una hora y cuarto, con un rating mínimo y necesario para que permanezca, puedo cambiar los juegos o los premios, pero sin abandonar mi manera de hacer televisión, ni traicionar mi estilo.
– No afecta porque se juega a la mañana o la tarde, se que ha subido el encendido y supongo que afecta en general por estar pendientes de los resultados.
– Sí, porque es un año nuevo, cambiamos muchos juegos y no sabía si la gente iba a aceptar estos nuevos entretenimientos o si avalaría la nueva propuesta. El año pasado nos fue bárbaro, pero no hay que pensar que uno tiene comprado el público porque hay que seducirlo continuamente.
-La intención era seducirlo con las mismas armas del año pasado y va fue bien.
– Lo vamos cambiando a diario con un biombo y un antifaz, eso depende de la visita, suponemos que es lo mejor, aunque no estamos atados a no tomar decisiones.
– Por un lado me da nostalgia y por otro muchas ganas de estar. Por otro lado digo que habremos hecho bien las cosas en algún momento para que hoy se siga haciendo después de tanto tiempo. Personalmente lo extraño porque lo sentía como algo muy intimo y personal.